-¿Cómo vienen las ventas esta temporada en el rubro indumentaria?
-Está dividido por segmento. El target medio-alto se resiente pero sigue comprando, aunque los locales que apuntan a un público más amplio tal vez sí están más golpeados, tanto por el precio del dólar como por los aumentos en las tarifas.
-¿Han aumentado las ventas con la suba del dólar?
-Sí, ya se siente el impacto, pero igual la gente hasta que no va a Chile y lo comprueba no se convence del todo. Las colecciones de invierno van a ser favorables porque se produjeron al costo de un dólar más bajo, aunque algunos proveedores ya nos anticiparon que la colección de verano va a venir con aumentos, debido a que algunos materiales son importados.
-¿Se infla mucho el precio de la ropa en el país?
-Depende de la marca y de dónde esté su local, pero no es tanto como la gente imagina. La presión impositiva y los costos de mantener un local son altos, y a eso hay que sumarle el ‘mal necesario’ de las cuotas con tarjeta de crédito, que nos cobran comisiones. Es difícil, pero hay que encontrar un punto medio entre costos y lo que el público pueda pagar.