Continúa el estado de alerta en Asia Oriental. Tras las pruebas militares llevadas a cabo durante el último mes, ahora Corea del Norte amenazó este jueves a Japón y Corea del Sur con un ataque nuclear en reprimenda por su apoyo “ardiente” a los Estados Unidos en la búsqueda de nuevas sanciones al gobierno de Kim Jong-un.
Las islas japonesas «deberían ser hundidas en el mar por la bomba nuclear Juché», aseguró el portavoz del Comité norcoreano para la Paz de Asia-Pacífico en un comunicado difundido por la agencia KCNA. Además acusó a los nipones de «no haber entrado en razón» después de que Corea del Norte lanzara un misil balístico intercontinental sobre el archipiélago el 28 de julio último.
El comité norcoreano cargó también contra el gobierno surcoreano, al que acusa de ser un grupo de «traidores» y «perros de Estados Unidos» al pedir sanciones más duras sobre sus «compatriotas». En otro párrafo, se aseguró además, que Pyongyang siente el deseo de «liquidar» a sus enemigos con su Ejército y su pueblo.
En el mismo tono, la agencia central norcoreana KCNA, informó también que Pionyang usará las armas nucleares para «hundir» a Japón y reducir EE.UU. a «cenizas», porque «hay un límite para la paciencia (pero) EE.UU. ha cometido otro terrorismo de Estado al preparar una nueva ‘resolución de sanciones’, pisoteando sin piedad nuestra soberanía y derecho a la existencia”. En consecuencia, “deben ser castigados. Reduciremos el territorio estadounidense a cenizas y oscuridad», amenazaron.
Cabe recordar que las tensiones en la región aumentaron de forma considerable luego de que el gobierno de Kim Jong-un realizara el pasado 3 de septiembre el lanzamiento de la sexta y más potente bomba nuclear. Tras la prueba, el Consejo de Seguridad de la ONU, por presión de Washington, adoptó por unanimidad una nueva ronda de sanciones contra el país asiático.
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