El nuevo convertible Dawn de Rolls-Royce un emblema de lujo, clase y poder adquisitivo, porque su valor de 300.000 euros (US$335.000) indica que, para la automotriz, todavía hay un público dispuesto a desembolsar lo que haga falta por un convertible de nivel.
El Dawn es el segundo convertible de la línea de Rolls-Royce y será más pequeño y más barato que la versión descapotable del Phantom de 390.000 euros. Rolls-Royce prefirió no revelar los números de las ventas del convertible Phantom.
El nuevo Dawn obtiene su nombre del Silver Dawn sin techo que Rolls-Royce produjo de 1950 a 1954. El auto comparte la distancia entre ejes con la coupé Wraith de 240.250 euros. Con la capota cerrada, el auto proporciona un paseo tan silencioso como un sedán. Como el Wraith, el modelo también posee la capacidad de anticipar, por medio de satélite, las condiciones del tránsito en el camino. El auto estará disponible a partir del primer trimestre del año que viene.
La marca BMW AG presentó el modelo de dos puertas luego de una década de declinaciones en las ventas para toda la industria de autos descapotables. Los consumidores del mercado masivo que quieren algo deportivo podrían haber optado por los SUVs, pero los más adinerados pueden tener ambos. Tres convertibles destinados a este tipo de consumidores harán su debut la semana que viene en el Salón Internacional del Automóvil en Fráncfort: el Dawn, el Ferrari 488 Spider y la versión descapotable del Clase S de Mercedes-Benz.
Antes sinónimo de libertad y rebeldía y disponibles en todos los rangos de precio, los autos convertibles se están transformando en juguetes casi exclusivamente para ricos. Y hay suficiente dinero a disposición de la elite del mundo para llevar a Rolls-Royce a desarrollar el Dawn. “Los ultra adinerados comprarán este auto”, dijo Tim Urquhart, analista para IHS Automotive en Londres.
Las ventas de convertibles han caído 51 por ciento desde su pico de 2004, a 409.770 autos el año pasado, mientras que las entregas de SUVs casi se cuadruplicaron, a 12,3 millones, de acuerdo a datos de IHS. A pesar de que las nuevas versiones convertibles del Ford Mustang, Chevrolet Camaro y el Serie 2 de BMW podrían ayudar a aumentar esos números para 2020, las ventas no volverán a los niveles de 2004, dijo Urquhart.
«Vemos un potencial muy bueno» para los descapotables de cuatro plazas, dijo el jefe de Rolls-Royce, Torsten Mueller-Oetvoes, en la presentación realizada a través de Internet. «Estamos convencidos de que hay que ofrecer más espacio en la parte trasera del auto», aseguró. Cada vez es más difícil encontrar convertibles accesibles.
Volkswagen AG retira del mercado popularel Eos. Renault SA frenó la producción del Wind y la versión descapotable del Megane. Ford Motor Co. dejó de producir el Thunderbird en 2005 y hoy vende sólo convertibles como parte de su línea Mustang.
Parte de la declinación de los convertibles deriva del cambio de foco de las automotrices a China, donde los consumidores de vehículos de lujo no soñarían con conducir un auto sin capota por las ciudades debido a la contaminación. Sin embargo, con el mercado de autos chino en baja, éste podría no ser un mal momento para dar a conocer un modelo de nicho que no está dirigido al país asiático, dijo Urquhart.
«El mercado chino está viendo una contracción en el negocio de artículos de lujo y eso no sólo es así para los autos», dijo Mueller-Oetvoes en una entrevista con Bloomberg Television hoy. «Por supuesto que eso también nos afecta, tengo que decir incluso de forma sustancial. Es difícil decir cuánto podemos compensar eso en el resto del mundo».
Fuente: Apertura 
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