La industria frigorífica argentina resistió el embate y los efectos económicos de la pandemia de coronavirus y en el cierre del primer semestre del año mostró crecimiento en la producción de carne y la exportación, a pesar de una baja en el consumo interno, la paralización durante los primeros meses del 2020 de los despachos a China y Europa, la caída de los precios internacionales y la aparición de algunos casos de Covid-19 positivos en plantas procesadoras.
Así lo informa una nota del portal Infobae.
“Nuestro sector, a pesar del coronavirus, sigue dando muestras de ser un sector con un alto grado de resiliencia y de adaptación a los grandes cambios que se produjeron con los cierres de los mercados compradores de carne de nuestro país. A pesar de la paralización de las compras de China primero y de la UE después, y de haberse generado una caída de precios internacionales del orden de 20%, las faenas se mantuvieron, incluso con algún pequeño incremento”, remarcó el presidente de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra), Miguel Schiariti.
Los números hablan por sí solos: según informó la entidad empresaria en su informe mensual de junio, en el primer semestre de 2020 la faena de hacienda vacuna llegó a 6,757 millones de cabezas y superó en 4,4% a la faena de enero-junio de 2019, lo que significó el sacrificio de 286,9 mil cabezas más que en el período mencionado, aunque si se corrige por la cantidad de días laborables, denota un crecimiento 2,8% en términos interanuales.
Esto se tradujo en una producción de carne en los primeros seis meses del año de 1,514 millones de toneladas res con hueso (tn r/c/h) , es decir 4,3% más que en igual semestre de 2019. Esto implicó un crecimiento de la cantidad ofrecida de carne vacuna de 62,1 mil tn r/c/h respecto al mismo período de 2019, de los cuales 1,1 millones de tn /r/c/h tuvieron como destino el mercado interno.
Esto significó una participación del mercado interno en el total producido del 72,6% en el período enero-junio, el menor porcentaje registrado para un primer semestre desde 1996 y una contracción interanual del 0,7%. También el consumo de carne vacuna por habitante se ubicó a la baja y en junio registró una caída interanual del 3,4% hasta los 50,5 kg/año, considerando el promedio móvil de los últimos doce meses. Esta estadística sitúa al consumo por habitante como el más bajo de todos los junio desde 2011.
Leé la nota completa aquí: https://www.infobae.com/economia/2020/07/09/el-impacto-de-la-cuarentena-el-consumo-de-carne-de-vaca-en-argentina-es-el-mas-bajo-desde-2011/