Sin categoría

Gremios destacan alta adhesión al paro nacional y ya evalúan más medidas

El Paro Nacional convocado por gremios opositores de todo el país en reclamo por modificaciones en el Impuesto a las Ganancias tiene alta adhesión e impacto, según dirigentes de esos sindicatos, quienes adelantaron que ya están pensando nuevas medidas de fuerza si no se abre el debate a estos pedidos.
El primero en hablar fue el diputado nacional y titular del gremio de trabajadores del peaje, Facundo Moyano, quien celebró el impacto del paro y afirmó que «la actividad económica en la ciudad de Buenos Aires es casi nula».
«Ojalá que el Gobierno entienda que en este reclamo hay gremios que suelen sentarse a aplaudir en la Casa Rosada. Hay que entender que no es un reclamo político. Por lo menos no es político partidario. Hace cuatro años que usan el mismo argumento», sentenció el sindicalista.
«Nos tenemos que preguntar cómo en una Argentina que no crece, donde los trabajadores quedan por debajo de la inflación en las paritarias, los bancos tienen ganancias extraordinarias. Si tenemos algún sector de donde sacar plata para compensar alguna asimetría es del sector que tiene ganancias extraordinarias», enfatizó el hijo de Hugo Moyano.
Según Moyano, el acatacamiento es «de casi 95 por ciento» y es un «éxito total». «Esperemos que luego de este parazo, el Gobierno entienda que es un reclamo legítimo», agregó.
En referencia a futuras medidas de fuerza si no hay reacción de la administración de Cristina Fernández al paro, Moyano analizó: «Hay que ver la respuesta del Gobierno, pero si no hay respuestas seguirán las medidas de acción directa».
En tanto, el secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, calificó como «completo» al acatamiento y definió al Gobierno como «una fábrica de recaudar que, encima, distribuye mal».
Además, contra los dichos del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sobre que sólo el «7 u 8 por ciento» de los afiliados a la UTA están afectados por el Impuesto a las Ganancias, aseguró que el gravamen alcanza al «80 por ciento» de los trabajadores del sector.
Y, sobre la alta adhesión a la huelga, matizó: «Para nosotros, no es ninguna alegría. Acá, el que pierde es el país. Y nosotros no queremos que esto suceda. El Gobierno se niega a razonar y sentar a una mesa para discutir».
En este contexto, el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, reconoció que «no va a pasar nada mañana» tras el paro, al advertir que la presidenta Cristina Fernández «hace lo que dice» el ministro de Economía, Axel Kicillof, y éste, a quien dijo que apodan «el rusito», «no da respuesta».
Al no descartar la posibilidad de profundizar el plan de lucha con un paro de 36 horas, Barrionuevo disparó: «Toda la vida, hasta (con) los propios milicos en plena dictadura siempre se conversó, siempre se dialogó; siempre hubo paros y se fue buscando cuál era la salida. Pero este gobierno no te da respuesta, no habla y al que va a hablar lo saca a patadas en el traste».
«No hay diálogo, éste es el problema más grave que tiene este Gobierno: ni con la oposición política, ni con los empresarios, ni con los trabajadores», expresó.
Del mismo modo, el secretario general de La Fraternidad, Omar Maturano, advirtió que si el Gobierno no escucha el reclamo para que se revea el impuesto a las Ganancias, el 14 de abril van «a dar a conocer un plan de lucha de los gremios de transporte».
«El 14 de abril vamos a dar a conocer un plan de lucha de los gremios de transporte que lo vamos a llevar adelante si no escuchan, si no hay cambios en esta decisión del Gobierno de no cambiar el impuesto a las Ganancias», aseguró el líder del sindicato de maquinistas de trenes.
El gremialista también afirmó que el Gobierno «es duro con los trabajadores y blando con los empresarios» y remarcó que los sindicatos tienen «derecho a protestar, a parar, a estar en contra».
Al respecto, Maturano puntualizó que los gremios están «reclamando no pagar el impuesto a las Ganancias porque el sueldo no es ganancia, es una remuneración por ir a trabajar todos los días», y cuestionó el mínimo no imponible del tributo, al remarcar que «a nadie le va a sobrar si cobra 15 mil pesos».
«Los 15 mil pesos es bruto, tenés 11 por ciento de descuento de jubilación, el 6 por ciento de obra social porque no nos dan salud. Yo cobro el 60 por ciento, el resto se lo lleva todo el Estado», se quejó el gremialista.
Por su parte,  el secretario general de la CTA opositora, Pablo Micheli, ponderó la contundencia del paro, al evaluar que la ciudad de Buenos Aires «está prácticamente desierta», pero se manifestó en contra de los cortes de accesos a la Ciudad porque «le dan un argumento al Gobierno para que diga que la gente no pudo ir a trabajar porque había piquete».
«Están realizando una medida en el marco de un paro, que ellos consideran que debe ser activo. Yo no lo hubiese hecho porque le dan un argumento al Gobierno para que diga que la gente no pudo ir a trabajar porque había piquete, cuando la gente no iba a ir a trabajar igual», opinó el gremialista.
Micheli también sostuvo que la medida de fuerza «va más allá del sujeto individual que convoca» porque, analizó, «el paro está siendo protagonizado por un sujeto colectivo que son los trabajadores».
«Lo que anticipábamos de que el paro iba a ser de una contundencia mayor que los tres paros anteriores se comienza a notar», señaló el gremialista en conversación con radio Blue y se quejó porque «los gobiernos toman siempre como variable de ajuste a los trabajadores».
 
 
 

Escribe un comentarios