Una dieta deficiente puede afectar de una forma negativa a la mente. Entre las consecuencias se encuentra la disminución de la memoria y la reducción de la capacidad de atención y aprendizaje, así como cambios en el estado emocional y la forma de comunicarse e interactuar con los demás. Por esto, es importante alimentarnos de una forma saludable.
A medida que envejecemos experimentamos un deterioro cognitivo. Si no se ejercita, ni se cuida, el cerebro se vuelve más lento para el procesamiento de la información. Además, las señales enviadas desde los cinco sentidos se vuelven más débiles y se produce una reducción en la producción de sustancias químicas del cerebro.
Sin embargo, tener una dieta nutritiva, incorporar hábitos saludables y llevar un estilo de vida equilibrado puede ayudar a frenar este proceso natural, según informa Infobae.
A continuación, una lista de siete alimentos recomendables para nutrir tu cerebro de una forma saludable:
1. Consume dos porciones de verduras de hoja verde todos los días, como acelga, repollo, apio, lechuga, hierbas aromáticas, espinacas y alcachofas.
2. Obtén tu dosis de ácidos grasos Omega 3. Se encuentra en las sardinas, atún, salmón, caballa, arenque, algas marinas, nueces de Castilla, chía y semillas de linaza. Reduce la ingesta total de grasas saturadas (como la manteca) y evita las grasas trans.
3. Come una gran cantidad de alimentos ricos en vitamina E como las almendras, avellanas, semillas de girasol, sésamo, papas, calabaza, aceitunas.
4. Aumenta tu ingesta de vitaminas B; con mariscos, lácteos, huevos, carne de res, hígado, pollo, legumbres, cereales fortificados, pan de trigo integral, granos enteros, verduras de hoja verde oscuro, verduras crucíferas, nueces, pepinos, espárragos, plátanos.
5. Ingiere frutas con un alto contenido de antioxidantes como la sandía y las moras. Diferentes estudios revelaron que los arándanos mejoran la memoria en adultos mayores.
6. Empieza a utilizar la canela en tus recetas. Un estudio demostró que tiene una acción neuroprotectora, ya que alivia los efectos negativos que una dieta alta en fructosa y alta en grasas tiene en el cerebro.
7. Bebe suficiente agua. Entre 2,5 y tres litros (13 tazas) para los hombres y dos litros (9 tazas) para las mujeres.
Por otro lado, es muy recomendable realizar ejercicio físico. Lo ideal es practicar un deporte aeróbico tres veces por semana durante 40 minutos y cuidar las horas de sueño. Además, también ayuda si reduces tu exposición a las neurotoxinas: elige productos de limpieza ecológicos, productos orgánicos y polvo para hornear libre de aluminio.
No te olvides de desafiar a tu cerebro con diferentes ejercicios. Puede ser armando un rompecabezas, haciendo malabares, memorizando la letra de una canción y haciendo uso de tu visión periférica (mirando al frente a un punto fijo, sin mover la cabeza y conscientemente poniendo atención a los objetos que están a ambos lados, es decir, en un rango de 180 grados). Trata de aprender un nuevo idioma o tocar un instrumento. Incluso, socializar en una fiesta y visitar un museo son actividades adicionales que mantienen una mente activa.
Para tener una vida saludable es necesario trabajar para incorporar hábitos saludables. Por eso es también es importante la educación de los más pequeños para que incluyan estas actitudes desde temprana edad para que luego te agradezcan de grandes.
«Muchas veces, cuando una pequeña empresa procura expandirse al mercado internacional, en lo primero que piensa es en el tipo de cambio y si los números son favorables. Sin embargo, lo que termina haciendo viable el negocio son las certificaciones previas. Creo que es la mayor razón por la cual muchos productos no se exportan a otros mercados», explica Claus Noceti, director del área de Comercio Internacional y Aduanas de PwC Argentina, según informa el sitio Apertura.
Son la carta de presentación para ingresar en el mundo. Aunque, según el último relevamiento realizado por la Fundación Observatorio Pyme (FOP), apenas el 17 por ciento de las pymes industriales argentinas posee una certificación de calidad ISO y solo un 7 por ciento está en proceso de implementación.
Asimismo, un 9 por ciento de las compañías tiene otro tipo de certificaciones, como las IRAM y las otorgadas por el INTI. Entre las normas generales, la ISO 9001:2008 especifica los requisitos para un sistema de gestión de la calidad y se destaca como una de las más importantes. «Es fundamental para la pyme que necesita solidificarse. Será difícil que se abran puertas sin cumplir con este estándar de calidad», aseguró Gustavo Pontoriero, gerente de Certificaciones del Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM).
La ISO 14.001 delimita los estándares de Calidad y Gestión Ambiental, y es muy valorada especialmente en los mercados europeos. «Sin esta certificación, ni siquiera se sientan a negociar», advirtió Noceti. La OHSAS 18.001 establece requisitos de Seguridad y Salud en el trabajo e involucra fundamentalmente a aquellas industrias (minería, oil, gas, por ejemplo) en las que sus trabajadores están expuestos a riesgos de salud. Pero las pymes que quieran ampliar sus fronteras también deberán ajustarse a determinadas normas específicas que varían de acuerdo al sector al que pertenezcan. Por ejemplo, para exportar alimentos son un requisito básico.
En este caso, la ISO 22.001 es vital para asegurar la seguridad e inocuidad de los alimentos: “esta certificación garantiza la calidad de un alimento en toda su cadena, desde la producción hasta el consumo», indica Marcelo Carbone, director del Grupo Crescent. Otras certificaciones a tener en cuenta son la FSSC 22.000, la GlobalGap y el sistema de gestión de buenas prácticas de manufacturas (BPM).
El tema de la pobreza en la Argentina ha tomado gran dimensión y polémica en las últimas horas, luego de que la presidenta Cristina Fernández asegurara que sólo el 5% del país está bajo esa condición y que después el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, no sólo sostuviera esa teoría sino además afirmara que «Argentina tiene menos pobreza que Alemania«.
En ese marco, aparece como interesante un dato difundido por el Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE): un adulto de la ciudad de Córdoba necesita poco más de $ 4.500 mensuales para poder acceder a lo que la entidad denomina una Canasta Total (CT) que incluye los productos indispensables para nutrirse adecuadamente más los servicios básicos que toda persona debe tener. Extendiendo eso a una familia tipo formada por dos adultos y dos hijos en edad escolar, el monto crece a casi $ 14.000.
Estos datos forman parte del informe mensual que el CPCE hace sobre la Canasta Alimentaria Nutricional (CAN) que, según sus mediciones, volvió a crecer con fuerza en abril un 1,79%, llevando la variación acumulada a mayo al 9,6% y la interanual, a 24,35%.
El resumen del relevamiento es el siguiente:
– En el mes de Mayo, la Canasta Alimentaria Nutricional (CAN), relevada en las localidades de la provincia de Córdoba alcanzó, para un adulto equivalente, la suma de $2.106,10 en Capital, $2.008,36 en Jesús María, $2.006,60 en San Francisco, $2.005,48 en Río Cuarto, $1.977,23 en Villa María y $1.963,50 en Marcos Juárez. Estos valores representan una suba mensual de 1,79% en Capital, 3,03% en Jesús María, 2,23% en Rio Cuarto, de 6,20% en Villa María, 1,71% en Marcos Juárez; y una caída de 0,51% en San Francisco.
– Para una familia de cuatro miembros (compuesta por un matrimonio y dos hijos menores) la CAN se valorizó en $6.507,84 en Capital, $6.205,83 en Jesús María, $6.200,41 en San Francisco, $6.196,95 en Río Cuarto, $6.109,64 en Villa María y $6.067,22 en Marcos Juárez.
– En Mayo la Canasta Total (CT), para el adulto equivalente, alcanzó un valor de $4.528,11 en Capital, $4.317,97 en Jesús María, $4.314,20 en San Francisco, $4.311,79 en Río Cuarto, $4.251,04 en Villa María y $4.221,53 en Marcos Juárez. Mientras que para una familia tipo (con dos hijos menores) los valores fueron $13.991,85; $13.342,54; $13.330,88; $13.323,43; $13.135,72 y $13.044,53 respectivamente.
– En lo que va del presente año, la variación interanual de la CAN fue positiva para todas las ciudades relevadas, siendo un 29,17% en Río Cuarto, 24,35% en Capital, 21,93% en Jesús María, 20,05% en Villa María, 20,04% en Marcos Juárez y 19,99% en San Francisco.
– La variación acumulada, para el periodo enero-mayo de 2015 fue positiva en todas las ciudades relevadas, siendo un 11,14% en Jesús María, 9,60% en Capital, 9,01% en Villa María, 8,20% en Río Cuarto, 5,75% en Marcos Juárez y 5,64% en San Francisco.
El famoso Almacén de Mario saldrá del Centro de Córdoba por primera vez desde su fundación en 1967. Y lo materializará con la apertura de un local en el corazón del barrio Villa Belgrano: Av. Gauss (casi) esquina Blas Pascal.
“Es una zona que hace tiempo veníamos estudiando y dijimos este año ‘nos animemos y vamos’. La demanda misma de la gente de la zona norte en el Centro era cada vez mayor, y eso impulsó nuestra apertura”, explica Mario Karabitian, socio de la firma.
Según el propio Karabitian, el otro gran incoveniente que vienen experimentando en el Centro es “la complicación de tanas manifestaciones, carriles selectivos y que la gente ya cambió su mentalidad de ir al Centro de compras. Ahora es al revés, evita ir al Centro lo más que pueda”.
Con el local de Av. Gauss que abrirá sus puertas el próxima lunes 1° de junio, “logramos más aire, en una avenida que permite estacionamiento en el barrio, bajar tranquilo, tener más tiempo, otros horarios, e inclusive venir de compras un sábado”, precisó.
El nuevo local contará con la misma oferta de productos y formato a los otros dos locales que funcionan sobre Dean Funes y Cañda. “Tendremos productos importados, excentricidades, cosas raras, especias, vinos y salsas difíciles de conseguir en otro lugar”, detalla.
Cabe destacar que los productos de Almacen de Mario ya tenían presencia en zona norte (entre tantas otras de la ciudad) a través de la modalidad “delivery” diseñada para cada deía de la semana. “Abastecemos a hoteles y restaurantes con cosas raras como aceites a la trufa, algunas bebidas, mostazas especiales o aceto italiano”, explica su socio.
“En principio queríamos abrir este local, pero de ahora en más veremos la respuesta del mercado. Esto es algo totalmente nuevo para nosotros porque por primera vez abrimos en un barrio”, completó Karabitian.
Una familia de cuatro miembros necesitó en abril $ 7.330 para acceder a la Canasta Básica Total (CBT) y no ser pobre, según datos del Instituto de Estadísticas del Defensor del Pueblo (INEDEP) de la Provincia de Córdoba.
Del mismo modo, necesitaron un mínimo de $3.235 para alcanzar la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y obtener los nutrientes esenciales que los salven de la desnutrición y la indigencia.
Así, al comparar los datos de abril con los de marzo, se constató una variación mensual de 2,71%, siempre según estas mediciones.
De acuerdo a la Defensoría, durante abril un Individuo Referente (sexo masculino 30/59 años de edad) precisó $1.046,86 para adquirir la CBA, mientras que laCBT para el mismo adulto ascendió a $2.371,76. Esta última contempla, además de los requerimientos alimentarios, una serie de bienes y servicios básicos e indispensables tales como transporte, educación, vestimenta, salud, entre otros.
Estos guarismos son los que llevaron a que un hogar compuesto por dos adultos y dos niños en edad escolar requirió $7.328,75 para no ser considerado pobre y precisó $3.234,79 para no caer bajo la línea de indigencia.
Según el organismo que dirige Mario Decara, los cinco grupos bajo análisis sufrieron variaciones. De mayor a menor las fluctuaciones fueron: “Frutas y Verduras” 7,44%; “Huevos y Lácteos” 5,81%; “Carnes” 3,63%; rubro “Otros” 3,00% y “Harinas y Legumbres” -0,91%. Si bien cuatro de los grupos aumentaron más que la variación intermensual, el motivo reside en la participación que tiene cada producto en la canasta. Por ejemplo, el kg de pan francés y la papa que durante abril presentaron bajas del -2%.
El grupo “Frutas y Verduras” tiene la particularidad que de un mes al otro suelen presentar importantes subas o bajas, por cuestiones estacionales o de oferta en el corto plazo. En abril, los artículos que mayor incidencia tuvieron en el aumento del rubro fueron: zanahoria (52,31%), tomate (22,63%), manzana (20,83%) y naranja (11,65%). También se registraron bajas; tal fue el caso de mandarina (-18,07%), zapallo (-11,58%) y cebolla (-4,93%).
Los “Huevos y Lácteos” constituyen el segundo rubro que mayor incremento exhibió (5,81%). Este grupo al estar conformado sólo por cinco productos, es posible que frente a la presencia o ausencia de segundas marcas/marcas económicas se presenten importantes variaciones. Durante abril, todos los productos que conforman el grupo vieron aumentar su precio, se destacó el incremento del queso de rallar (7,47%), leche entera (6,23%) y huevos blancos (5,39%).
Las “Carnes” presentaron un aumento del 3,63%. En el mes bajo análisis, el 100% de los cortes vacunos relevados presentaron subas, se destacó el incremento de: carnaza (5,66%), nalga (5,60%), pollo (5,36%) y falda (4,21%).
El grupo “Otros” sufrió una suba del 3,00%. Se observó que diez de los trece artículos que constituyen el rubro presentaron aumentos. Los ítems que mayores fluctuaciones experimentaron fueron: café común (5,83%), mermelada (3,17%), yerba con palo (1,89%) y dulce de leche (1,82%).
Por último, las “Harinas y Legumbres” presentaron una baja del -0,91%. Durante abril, la harina 000, la polenta y los fideos secos vieron aumentar su valor por encima del 3%.
El Índice Barrial de Precios (IBP) que elabora mensualmente el Centro de Investigaciones Participativas en Políticas Económicas y Sociales (CIPPES) arrojó para marzo un costo de la canasta básica superior a $ 3.000 para la provincia de Córdoba y superior a $ 7.000 cuando se tiene en cuenta la canasta total.
Concretamente, tomando como base las mediciones que hace el CIPPES en Córdoba y Río Cuarto (en marzo fueron 110 comercios de barrio, con 2.679 precios relevados), una familia tipo necesita $ 3.136 para cubrir sus necesidades mínimas de alimentación y $ 7.119 para no caer bajo la línea de la pobreza.
El principal dato a tener en cuenta es que la canasta cordobesa es la más cara. “Lo anterior coloca a Córdoba como la primer provincia (de las siete en que se mide el IBP) en superar el techo de los $7.000 en la línea de la pobreza. El IBP en la provincia de Córdoba asumió (al igual que el mes pasado) el valor más alto para la CBA en los siete distritos que estimaron el índice en marzo 2015”, destacó el CIPPES.
En el ranking le siguen Salta ($3.101) y Mendoza ($3.078) y, en relación al Conurbano Bonaerense ($2.909), la canasta local se ubicó un 7,8% por encima de aquella. El promedio entre los distritos que estimaron el IBP el mes pasado alcanzó los $2.952. Por su parte, el valor más bajo para la CBA se encontró en Chaco, con $2.758.
Presión fiscal alta, la clave
Según el CIPPES, “una de las razones que explican que la provincia de Córdoba tiene la canasta básica de alimentos más cara del país es la alta presión fiscal de la provincia, que se encuentra en máximos históricos”.
Un reciente informe elaborado por esta misma entidad señala que la presión fiscal de la provincia, medida en los recursos tributarios y no tributarios provinciales como porcentaje del producto bruto geográfico (el valor de los bienes y servicios que se producen en la provincia), pasó de 4,48% en 1999 a 8,23% en 2014, principalmente mediante aumentos en las alícuotas del impuesto sobre los Ingresos Brutos.
“Así, las empresas del rubro Alimentos y Bebidas (mayoristas) pagaban una alícuota de 2,5% en 2008; 3,5%, en 2009; 4%, en 2010 y 4,75%, a partir de 2013. Además, la presión fiscal se disparó por el aumento de los ingresos no tributarios, mediante la creación de nuevas tasas y fondos de asignación específica, como la controvertida tasa vial. Comparando a la provincia de Córdoba con la de buenos Aires, los efectos negativos de dicha tasa, establecen que en Buenos Aires el gasoil y la nafta súper son 8,6% y 15,7% más baratos que en Córdoba, respectivamente”, recordó el CIPPES.
Desaceleración inflacionaria
Con todo, el CIPPES sostuvo en su informe que “si comparamos la evolución de la CBA de Córdoba y Río Cuarto con respecto al mismo mes del año pasado, se observa que el aumento anual en los alimentos es de 18,6%. Este aumento anual muestra claramente que la inflación anual se ha reducido respecto al año pasado. La principal razón de esta caída en la inflación se encuentra en la recesión económica y que el tipo de cambio respecto al dólar se ha mantenido relativamente fijo, acrecentándose el atraso cambiario, y la consiguiente pérdida de competitividad externa”.
En base a los precios de los distintos productos relevados (un total de 50 artículos), el gasto en productos de almacén para una familia tipo ascendió el mes pasado a $1.436 (el 46% de la CBA), en el rubro verdulería a $502 (el 16% de la CBA) y en carnicería a $1.198 (el 38% % de la CBA).
Los alimentos y bebidas que integran la Canasta Alimentaria Nutricional (CAN) indispensable para poder sobrevivir cerrarán el año con un aumento de sus precios cercano al 30%.
El dato se desprende del relevamiento mensual que realiza el Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE) y que, para noviembre, detectó un aumento de los productos del 1,5% en relación a octubre y del 27,9% mirando en retrospectiva hacia enero.
Así, si se mantiene un ritmo de entre 1,5 y 2% de inflación en diciembre –no hay que descartar un alza mayor producto de la mayor demanda de cara a las fiestas de fin de año–, el año finalizará con un alza del 30% en los productos básicos.
Un parámetro fiable en tal sentido es que, noviembre 2014 contra noviembre 2013, la inflación de la CAN es del 33,8%.
Así, actualmente una familia tipo de cuatro miembros (un matrimonio y dos hijos menores), necesita $ 5.776,95 para poder alimentarse correctamente, más de $ 1.000 por encima de lo que requería a principios de año.
En cuanto a los resultados que el CPCE detectó en el interior, son los siguientes:
*Jesús María: la canasta subió 2,38% en relación al mes anterior. El alza interanual es del 34,43% y el acumulado desde enero, 27,51%.
*Marcos Juárez: tuvo un incremento respecto a octubre de 1,34%; la suba interanual es de 32,72% mientras que la variación acumulada este año es de 24,08%.
*Río Cuarto: alza intermensual de 3,72% e interanual de 37,83%, el acumulado desde enero fue de 28,05 %.
* San Francisco: alza respecto a octubre de 1,93% en relación a noviembre de 2013, el 33,37% y desde enero, 26,02%.
*Villa María: suba de 1,04% en relación al mes anterior. La variación interanual de la CAN respecto a noviembre de 2013 fue de 33,64% mientras que la acumulada fue del 26,55%.
El costo de llenar un changuito de supermercado con una canasta de 34 productos de primera necesidad creció 407% entre diciembre de 2007 y la actualidad, según revelan datos de Consumidores Libres, publicados por el sitio especializado WebRetail.
Según el relevamiento que hace la entidad en seis supermercados de la Capital Federal desde hace 19 años, a fines del 2007 una compra promedio era de $ 315,68, y los mismos productos este mes cuestan $ 1.600,32.
La canasta incluye varios cortes de carne, pan, frutas, verduras, fideos, productos enlatados y de limpieza y su relevamiento se hace en seis bocas distribuidas en La Boca, Caballito, Liniers y Pompeya.
En el rubro de carnes, el kilo de asado que en diciembre de 2007 se pagaba a $ 9,93 hoy se abona a 61,66, mientras que bola de lomo, que se usa para las milanesas, pasó de $ 12,59 a $ 75,85.
La leche fluida muestra uno de las subas más fuertes de todo el grupo, al pasar de $ 2,6 a $ 15,33 durante el período, con un incremento del 489%, por encima del promedio de la canasta. Aun si se hiciera una comparación con Precios Cuidados, el incremento del valor del producto La Serenísima, que se publica a $ 8,15 en los supermercados Coto de la Capital Federal, sería de 213% para el período.
En el segmento de los lácteos, el queso fresco por salut que en 2007 costaba $ 23 el kilo, en noviembre de este año costaba $ 111, con un incremento de 382,6%.
El titular de Consumidores Libres, Héctor Polino, señaló que “durante 2006 y 2007 los salarios todavía le ganaban a la inflación, pero luego se revirtió sobre todo desde el último año”. Polino recordó que el ex secretario de Comercio Guillermo Moreno “intervino el INDEC porque comenzó a difundir los aumentos de precios”, y señaló además multó a consultoras y a su propia entidad defensora de los consumidores.
El pan, otro producto de alta sensibilidad, pasó de costar $ 2,69 en ese momento a $ 18 en la actualidad, mientras que el arroz pasó de $ 4 a $ 13,16. El aceite, por un litro y medio, pasó de valer $ 6 a costar $ 14, mientras que café varió de $ 4,5 a $ 17,5 los 250 gramos.
Si se toma la canasta que mide desde hace 19 años esa entidad de defensa de los consumidores, en diciembre de 2007, un salario mínimo vital y móvil era de $ 980 y la canasta equivalía al 32%.
Casi siete años después el salario mínimo es de $ 4.400 y la canasta representa el 36% de esa cifra, lo que implica una pérdida del poder de compra de 4 puntos.
Por deseo, convicción, oportunidad económica, inquietud profesional o casualidad. Más allá de la diversidad de sus orígenes, una cosa es segura: los food trucks porteños superaron el mote de tendencia pasajera y reclaman poder circular libremente como ya sucede en Nueva York, París y San Pablo.
Mientras en nuestro país la legislación se hace esperar, los emprendedores gastronómicos que se animaron al formato estacionan sus restaurantes móviles en eventos públicos y privados, desde el recital Lollapalooza y la feria Masticar hasta congresos tecnológicos en La Usina del Arte o ferias de diseño en El Dorrego, según informa el sitio Apertura.com.
Uno de los que siempre dice presente es Nómade Comida Rica, de Ernesto Lanusse: el empresario es uno de los fundadores de la Asociación de Cocineros y Empresarios ligados a la Gastronomía (Acelga) y miembro activo en la Asociación Argentina de Foodtrucks: “Hoy, las leyes dicen que en la vía pública sólo podemos vender choripán, pizzas, panchos y manzana caramelizada. ¡Ni siquiera es legal servir un jugo exprimido! Y mientras esperamos que eso cambie, la encuesta de alimentación llevada a cabo por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires muestra que el 60 por ciento de los chicos argentinos son obesos. No hay más que cruzar datos y darse cuenta de lo evidente: comemos mal porque hay un problema de educación pero también de oferta”, argumenta.
Lanusse –en cuya hoja de ruta figura su asesoramiento en gestión a cocineros de fuste como Dolli Irigoyen, Osvaldo Gross y Narda Lepes– admite ser “un fanático de las cosas funcionales”. Por eso, encontró en el food truck el vehículo ideal para ofrecer una propuesta de sabores con identidad a precios accesibles. Lo casual no le quita lo estiloso: su camioneta está decorada en stencil de colores vibrantes y con alusiones a algunos de sus máximos referentes: “Me inspiré en la fachada de graffitis del restaurante de Germán Martitegui para homenajear a personajes que para mí son muy importantes en la cocina mundial, como el creador de Momofuku, David Chang; o el chef peruano Javier Wong, un prócer del ceviche.
Ellos encontraron algo valioso y lucharon por ese concepto”, reflexiona. ¿Su hit? El min pao, un bocadillo de origen chino relleno de carne, cerdo u hongos portobello con la exquisita e irresistible textura de una nube. Para Iván y Martín Bouquet, los hermanos que desde hace cinco años se desempeñan como chefs ejecutivos de la marca Croque Madame, la idea de un food truck nació de manera similar: “Queríamos abrir un local, pero el momento es complicado: prácticamente se cierra un restaurante por día.
Encontramos en este modelo de negocio una posibilidad de empezar sin demasiado gasto inicial”, cuenta Iván. Así lanzaron Bon Bouquet, una crepería móvil montada en un clásico camión de acero inoxidable equipado con horno, fuegos, heladera y freezer. Allí elaboran, en el momento, sus deliciosas crepes de salmón ahumado y quiches vegetarianos.
A Pablo Erli, el bichito del food truck le picó mientras vivía en Europa. “Cuando uno viaja, rara vez tiene tiempo de sentarse dos horas en un restaurante. Tengo lindísimos recuerdos de sabores y aromas que probé en las calles”, admite. Junto a su amigo de la infancia y chef Martín Mac Donell dio vida a Morfa: en una furgoneta retro ofrecen “una propuesta superadora en gastronomía al paso” cuyos best sellers son el hot pastrami y el sándwich de pollo al curry. En cuanto a la incertidumbre legal, reflexiona: “Va a cambiar. Es sólo cuestión de tiempo, porque Buenos Aires no se puede quedar afuera de la demanda de comida rica, de calidad y a precios accesibles en la vía pública. Acá tenemos una oferta callejera que muchas veces no cubre estándares mínimos de higiene, rozando lo peligroso. En ese sentido, el formato de los food trucks es una solución”.
«Exportación de Alimentos a Brasil. Requisitos y regulaciones para la habilitación de alimentos de productos», es el eje de la charla gratuita que organiza la Agencia ProCórdoba, dependiente del Ministerio de Industria, por medio del Centro de Negocios de Córdoba en Brasil (CordoBra).
En la ocasión, disertará la Ing. Ana María Giandon, especialista en asuntos regulatorios de Brasil en materia de alimentos y bebidas y Directora de AMG Foods.
La propuesta se llevará a cabo el día martes 2 de diciembre de 9:00 a 13:00hs. en el Salón Net Point del Howard Johnson Hotel & Suites La Cañada (Figueroa Alcorta 20), en Córdoba Capital.
Durante el evento se detallarán las competencias de los ministerios y las autoridades involucradas (Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento -MAPA, por sus siglas en portugués- y la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria -ANVISA, por sus siglas en portugués-) y las normas generales de información, contenido, regulaciones específicas de productos, etc.
Además, se desarrollarán especificaciones sobre el envasado de productos, los requisitos establecidos para el etiquetado general y para el etiquetado nutricional (porción, modelos de información nutricional).
A su vez, Giardon explicará el registro y aviso de importación de productos. En tanto, para los interesados en desembarcar en el país vecino, también expondrá sobre la habilitación de establecimientos (según normativas de MAPA y ANVISA).
La jornada está destinada a las PyMEs del sector alimenticio que sean exportadoras o con potencial exportador y que tengan interés en el intercambio comercial con este socio estratégico de la Provincia de Córdoba.
Las inscripciones están abiertas hasta el día 29 de noviembre. El evento es gratuito pero con cupo limitado. Para inscribirse, remitirse al mail cordobra@procordoba.org o al tel.(0351) 434-3065/66/67/68 interno 801.
Esta iniciativa se enmarca en el desarrollo del Programa de CordoBra que, entre sus objetivos, pretende crear cultura exportadora de Córdoba a Brasil, acercando a los empresarios cordobeses información que facilite oportunidades de negocios.