(Télam) – La presidenta Cristina Fernández de Kirchner dispuso la prórroga de las sesiones ordinarias del Congreso hasta el 31 de diciembre próximo.
La decisión fue dispuesta a través del decreto 2063, publicado hoy en el Boletín Oficial con las firmas de la mandataria y el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
«Prorróganse las sesiones ordinarias del Honorable Congreso de la Nación hasta el 31 de diciembre de 2014», ordena la normativa.
En el texto se da cuenta de que la medida se adoptó «en uso de las facultades conferidas por los artículos 63 y 99 inciso 9 de la Constitución Nacional».
Semanas atrás, en su habitual conferencia de prensa matutina en la Casa Rosada, Capitanich ya había adelantado la posibilidad de que el Gobierno prorrogara las sesiones ordinarias del Parlamento, que culminan a fin de mes, ya que ese era «el camino más expedito» para tratar proyectos enviados por Poder Ejecutivo y que están pendientes de sanción.
«A partir del 30 de noviembre existen dos posibilidades para el tratamiento de iniciativas legislativas: prórroga de sesiones ordinarias, o convocatoria a extraordinarias; nosotros creemos que el camino más expedito sea la prórroga de sesiones ordinarias», había dijo el funcionario.
Entre los proyectos enviados por la Casa Rosada al Congreso para ser aprobados este año se encuentra la reforma del Código Procesal Penal, que ya obtuvo dictamen en el Senado tras varios cambios al texto original y será debatido el miércoles próximo en el recinto.
Otra iniciativa que el Ejecutivo aspira a sancionar antes de que finalice 2014 es la que establece la regulación del sistema de telecomunicaciones, denominada «Argentina Digital».
(DyN).- El oficialismo impulsó en el Senado la firma de un dictamen favorable, con varios cambios al texto original, referido al proyecto del Poder Ejecutivo para modificar el Código Procesal Penal, que el próximo miércoles intentará aprobar en el recinto.
No obstante los cambios realizados en distintos artículos, el interbloque del Frente Amplio UNEN y el peronismo disidente anunciaron que presentarán dictámenes en minoría.
La reunión fue encabezada por los presidentes de las comisiones de Presupuesto, Aníbal Fernández, y de Justicia, Pedro Guastavino, ambos del Frente para la Victoria.
El jefe del bloque del FPV, Miguel Angel Pichetto, destacó antes de poner a la firma el despacho que el del Código fue «un debate de casi siete meses» y consideró que muchos de los reparos expresados por senadores opositores fueron zanjados con las modificaciones introducidas al texto.
Por ejemplo, Pichetto señaló que «se eliminó el concepto de conmoción pública» que dijo «se usaba en la época de (el ex presidente de facto, Juan Carlos) Onganía para negar la excarcelación».
Por otra parte, el jefe del bloque kirchnerista marcó que «para nosotros es un derecho» para los extranjeros que se pueda suspender el juicio a prueba si abandonan el país.
El radicalismo insistió en la conveniencia de avanzar en paralelo con el juicio por jurados y la modificación de la ley del Ministerio Público Fiscal. El oficialismo ratificó la intención de aprobar el proyecto el miércoles 19 en el recinto y girarlo a la Cámara de Diputados para que lo convierta en ley.
(DyN) – El secretario de Seguridad, Sergio Berni, aseguró que Argentina está «infectada de delincuentes extranjeros» que llegan al país «amparados por la laxitud judicial», por lo que insistió con que «esto hay que discutirlo en el Congreso».
«Nadie puede decir que el discurso es xenófobo ni que esto implica echarle la culpa de los delitos a los extranjeros. Quien diga eso es porque no entiende nada de lo que está hablando o tiene otras intenciones más allá de querer o no solucionar los problemas del delito», señaló.
En declaraciones a las radios La Red, Vorterix y Diez, Berni se quejó de que los delincuentes llegados desde el exterior «generan delitos que son rápidamente excarcelables y, mientras esperan un juicio que nunca llega, siguen cometiendo delitos. Esto parece un saco roto».
«No hago análisis, le cuento a la sociedad los problemas que tenemos», aseveró el funcionario, quien dijo contar con «escuchas» en las cuales delincuentes extranjeros le dicen a sus connacionales «venite para acá que no pasa nada».
El funcionario se manifestó así un día después de que siete ciudadanos colombianos fueran detenidos acusados de integrar una banda, presuntamente de las llamadas «pincharruedas», que habría intentado cometer un asalto a metros del fiscal Carlos Stornelli.
«Esto ha tomado estado público porque se trató de la figura de un fiscal de la Nación, pero yo le puedo asegurar que esto pasa todos los días y que lo que ha sido ayer ha sido una muestra más que significativa de lo que venimos sosteniendo hace más de tres años», prosiguió.
Según el funcionario, «estamos infectados de delincuentes extranjeros que vienen a la Argentina a delinquir amparados por la laxitud judicial. Esto pasa todos los días. Yo les puedo asegurar que, de los que detuvimos ayer, seguro que más de uno tiene varias entradas en la Policía Federal».
«Esto hay que discutirlo en el Congreso. Si en el Congreso, donde está la representatividad de la voluntad de los argentinos, determina que los delincuentes extranjeros se pueden quedar en la Argentina, pueden seguir delinquiendo, pueden entrar y salir por una puerta (de la comisaría), que pueden robar cinco, seis, ocho, diez veces en un año, así se hará y así se seguirá respetando la ley, porque eso significa la democracia», añadió.
Empero, advirtió que «es el mundo del revés: ahora nos tenemos que adaptar nosotros a las necesidades de los delincuentes. Es una cosa de locos».
En ese sentido, citó que el «motochorro» Gastón Aguirre, filmado mientras asaltaba a un turista en el barrio de La Boca, «se paseaba por los canales como una estrella de rock. El año que viene», esta persona, «tiene más posibilidades de estar bailando en un programa de televisión que en una cárcel con esta legislación».
Berni reclamó que «la causa de ayer recayó en una jueza a la que conozco: es muy dura , severa, muy buena jueza, dedicada. ¿Qué puede lograr? ¿que estén dos días más presos, tres días menos? El sistema nuestro permite que estas personas estén nuevamente en la calle. Una vez en la calle, no van a la iglesia a pedir disculpas: van nuevamente a delinquir porque vienen a eso».
Consultado sobre quienes consideran que éste es un «discurso xenófobo», el secretario de Seguridad contestó: «Los que dicen eso no tienen la responsabilidad de estar todos los días en la calle».
Insistió en reclamar «la necesidad de generar herramientas para la Justicia, para que sea ágil, dinámica», y añadió que «estas personas, cuando salen a robar, dejan un tendal en la ciudad». Cuando se le preguntó «por qué eligen Argentina para robar», Berni respondió: «Porque la laxitud judicial así se lo permite».
«Es mentira que el delito no se puede solucionar. Sí se puede solucionar, pero para eso hay que tener decisión, coraje y voluntad», prosiguió, y se quejó de los legisladores opositores a quienes «uno los escucha hablando por televisión y radio, pero a la hora de tener que sentarse a debatir, se levantan y se van, como hicieron con la reforma del Código Civil».
Elisa Carrió es famosa por sus frecuentes denuncias y duros cuestionamientos contra el Gobierno nacional, pero ahora sorprendió ampliando su abanico de críticas incluso hasta aliados del propio partido UNEN al que ella representa en la Cámara de Diputados.
A continuación, se resumen los diferentes cables de la agencia DyN que consignan los ataques de Carrió contra sus pares:
UNEN
La diputada criticó la «imbecilidad de algunos en UNEN», el espacio de centro-izquierda que integra, y a los opositores que apoyan proyectos del Gobierno sin tener en cuenta sus consecuencias, al considerar que son «mil boludos que no hacen verano».
«El otro día estaba con el gobernador de Corrientes, (Ricardo) Colombi, y me dijo que los candidatos no recorren el país. Yo estoy cansada de recorrer el país, 20 veces lo recorrí. Entonces me contesta ‘sí, pero una golondrina no hace verano’, y yo le contesté, ‘es cierto, pero mil boludos tampoco’. No hay mala fe. Es necesidad de figuración», manifestó.
La oposición
Carrió le reclamó a todo el arco opositor dejar en soledad al Gobierno cuando trate en el Congreso el proyecto de Código Procesal Penal, y justificó ese pedido en que los legisladores no kirchneristas «no» pueden «legitimar la impunidad» que se buscaría con el nuevo texto legal.
Se apunta a «la impunidad y el manejo (de las causas) por (la Procuradora General Alejandra) Gils Carbó. La votó la oposición, pero no tendríamos que haber tenido a esta fiscal», reprochó la fundadora del ARI.
Lorenzetti
La ex candidata a presidente renovó sus críticas al titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, de quien dijo no creerle «nada» cuando asegura que no tiene intenciones de ser «candidato» a algún cargo político.
«Lorenzetti quiere ser candidato a algo. No le creo nada a Lorenzetti», advirtió la aspirante presidencial del FAU e insistió en que el integrante del alto tribunal «ya se hizo millonario con el Código Civil», en su carácter de asesor de la reforma de ese instrumento que impulsó el Ejecutivo.
Además, le adjudicó a una relación de amistad con el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, uno de los hombres de mayor peso del Gobierno nacional. «El señor ya se hizo millonario con el Código Civil. ¿Qué sentencias le va a sacar ahora a favor al Gobierno, a partir de hacerse millonario con la publicación del libro? Esto es un acuerdo. Zannini y Lorenzetti son amigos», disparó la dirigente.
Massa
Para Carrió, el aspirante presidencial del Frente Renovador, Sergio Massa, es «íntimo amigo» del fiscal general de San Isidro, Julio Novo, acusado por «encubrimiento agravado y gravedad institucional» en una causa por los crímenes de supuestos narcos colombianos, aunque el ex intendente de Tigre lo negó.
«¿Saben quién es el íntimo amigo de Massa? El fiscal Novo, investigado por narcotráfico. Cuando uno lee que el candidato es Massa para todos los medios, que fue el jefe de Gabinete de la Ley de Medios, uno se pregunta ¿dónde estamos?», apuntó Carrió.
Insaurralde
La diputada volvió a cargar contra su par Martín Insaurralde, del Frente para la Victoria, y le pidió que «antes de casarse opte por ser diputado nacional o por ser intendente de Lomas de Zamora».
«Hemos tenido impugnaciones de aquellos intendentes electos en funciones que pidieron licencia en sus funciones violando claramente las compatibilidades establecidas en la Constitución y una degradación de la política», expresó Carrió.
«El señor Martín Insaurralde persiste en la inconstitucionalidad por lo cual solicito que antes de casarse opte por ser diputado nacional o por ser intendente de Lomas de Zamora», reclamó en referencia al anunciado casamiento que el legislador tiene previsto contraer con la modelo Jéssica Cirio.
El Frente Renovador y la Unión Cívica Radical respaldaron la propuesta del kirchnerismo para expulsar a los extranjeros que delinquen, una iniciativa que integra el nuevo Código Procesal Penal que el Gobierno ya giró al Senado.
En diálogo con radio Mitre, Sergio Massa dijo: «Estamos de acuerdo con herramientas que permita expulsar a inmigrantes que cometen delitos, como creemos que es importante terminar con la puerta giratoria y las trampas procesales».
El ex intendente de Tigre recordó que, meses atrás, cuando su espacio pidió medidas más duras contra los delincuentes, desde el oficialismo lo habían tildado de reaccionario y «fascistas». «El tiempo nos dio la razón y la Argentina necesita un sistema de justicia más estricto», analizó.
En tanto, el senador radical Mario Cimadevilla declaró a Infobae TV: «Nuestra Constitución dice que todos somos iguales ante la ley, pero habla de los hombres de buena voluntad que quieran habitar el sueño argentino. Un hombre que viene a delinquir no tiene buena voluntad, así que esa generosidad de la Carta Magna no le puede caber».
En este contexto, el legislador admitió que hubo un cambio de la presidente Cristina Kirchner respecto a la política de inseguridad: «En este tema de los extranjeros, creo que está bien orientada».
(DyN) – El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó que la oposición debería “aprobar muy rápidamente” la reforma al Código Procesal Penal ya que “es lo que pedían” y resaltó que el proyecto tiene «un alto nivel de consenso» entre juristas y académicos.
En su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada, Capitanich se quejó de una “aviesa mala intención de muchos medios (de comunicación) para confundir a la ciudadanía” sobre el contenido de la propuesta y reclamó a los dirigentes opositores que sean «coherentes» y que den un voto favorable.
El jefe de Gabinete dijo ver «con mucha preocupación el rol de la oposición” porque se opone “a todo lo que viene del Gobierno” y les reprochó a sus referentes: “Piden debate de ideas y cuando se da el debate, reaccionan de un modo autoritario”.
Sobre el proyecto de Código Procesal Penal anunciado anoche por la presidenta Cristina Fernández a través de la cadena nacional de radio y televisión, el ministro sentenció, en dirección a la oposición, que “deberían aprobar muy rápidamente esta iniciativa, porque es lo que pedían”.
“Todo el tiempo la oposición pedía una reforma de esta naturaleza, y la verdad que esperemos que sean coherentes con lo que pedían”, desafió el ministro coordinador sobre el proyecto, que propone acelerar los tiempos judiciales, prevé penalizaciones a fiscales y propone más dureza contra los extranjeros que delinquen.
Y agregó: “Siempre piden debates de ideas, y cuando hay debate de ideas, reaccionan de un modo autoritario; cuando vamos al Congreso, en dos oportunidades la oposición se retiró del recinto, en una actitud manifiestamente antidemocrática”, recordó.
Capitanich remarcó que “el pueblo argentino en su conjunto” reclamaba la reforma del Código de Procesal Penal, a la que calificó como “una herramienta extraordinariamente positiva para garantizar la accesibilidad a la Justicia en tiempo y forma”.
Además, aseguró que “este proyecto cuenta con un alto nivel de consenso entre juristas y académicos” y se quejó de una “aviesa mala intención de muchos medios (de comunicación) para confundir a la ciudadanía” sobre el contenido de la propuesta.
“Hay una estrategia de los medios de comunicación opositores de desnaturalizar y confrontar sistemáticamente con cualquier iniciativa del Gobierno; el rol de la oposición en ultima instancia es oponerse a todo lo que viene del Gobierno, y es donde ellos desnaturalizan el concepto de diálogo”, fustigó.
En tanto, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, aseguró que «es de un grado de ‘hijadeputez’ (sic) increíble» afirmar que a la presidenta Cristina Fernández «no le preocupa» la inseguridad.
«Cuando la Presidenta habla de que la inseguridad tiene mucho de marketing, no lo hace con el sentido de creer que no hay problemas vinculados a la inseguridad. Todo lo contrario», indicó el funcionario.
En declaraciones a radio América, Randazzo sostuvo que «la idea de querer distorsionar esto, de que querer hacer aparecer como que a la Presidenta no le preocupa esto, es realmente de un grado de ‘hijadeputez’ (sic) increíble, para decirlo de una forma clara. ¿Cómo no le va a preocupar a la Presidenta? Nada más alejado de eso».
(DyN) – El gobierno nacional salió a defender el anteproyecto de reforma del Código Penal y apuntó contra el diputado y referente del Frente Renovador Sergio Massa, a quien acusaron de «oportunismo» y de incurrir en una «ignorancia supina».
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, tildó a Massa de ejercer «oportunismo» para «llevar agua a su molino» y advirtió que es de «ignorancia supina» querer convocar a una consulta popular en contra del anteproyecto de reforma del Código Penal, que impulsa el Gobierno.
En sintonía, el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, consideró necesaria la reforma al sostener que al Código «hay que aggiornarlo», al tiempo que pidió a la Justicia que «aplique la ley y reiteró que «pareciera que lo único que le importa son los derechos de los delincuentes», con relación a las críticas que recibió el proyecto.
También en tono crítico contra el referente del Frente Renovador, el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, advirtió que muchos dirigentes «no sólo deberían volver a leer, si leyeron alguna vez, sino ser más cuidadosos y no tan oportunistas».
Para Capitanich, Massa, en sus cuestionamientos, cometió «groseros errores que ofenden la calidad profesional de quienes han participado del proceso de elaboración del anteproyecto», entre ellos el jurista radical Ricardo Gil Lavedra y el ministro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni. «El camino de una reforma es a través de un sistema amplio de participación y debate (en el Congreso) y quien tenga observaciones las podrá hacer cuando se conozca el proyecto. Lo que no se puede hacer es oportunismo político, llevar agua para su molino», advirtió el funcionario.
En tanto, Urribarri amplió: «Me llamó la atención Cobos también, que si bien tiene (en la comisión redactora) al doctor (Ricardo Gil Lavedra) que representa al radicalismo como él, sin conocer el proyecto ya anticipa que se va a oponer. La verdad, muy livianos muchos de estos dirigentes en sus opiniones».
Además del oficialismo, dirigentes de otras fuerzas, como la diputada Victoria Donda (Libres del Sur-FAP), también apuntaron contra Massa por sus cuestionamientos y, en este sentido, afirmó que el ex intendente de Tigre «sólo realiza críticas oportunistas para confundir a la sociedad».
Sin embargo, el diputado radical José Cano criticó al kirchnerismo al tildarlo de «campeón mundial en maniobras de distracción» y estimó que la reforma del Código Penal, que dio pie a un debate político y social, es una maniobra del partido del Gobierno para diluir su responsabilidad en el avance del narcotráfico.
El diputado por Tucumán, vicepresidente del bloque de la UCR, indicó que «la oposición no tiene que comerse el amague de la Presidente en relación a la reforma del Código Penal y debe forzar la discusión sobre el problema más crítico que tiene la seguridad del país: el nefasto vínculo entre la política y las bandas narcos que se han instalado a sangre y fuego en nuestro territorio».
Además, apuntó que «los sicarios matan gente a pocas cuadras de la Casa Rosada, pero nos obligan a debatir si hay o no que castigar a los periodistas o bajar o subir penas a los delincuentes de poca monta. Es una canallada».
La Iglesia pide más debate
En este contexto, el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, reclamó un debate «más amplio» antes de avanzar en la reforma al Código Penal y pidió que se tome en consideración la opinión de los «sectores sociales» y no sólo de los especialistas.
«No me animo a decir que tendría realizarse un plebiscito, aunque sí creo que, además de la mirada política, tiene que haber una mayor participación de las distintas organizaciones sociales y de diversos credos para enriquecer la propuesta», aseveró.
En declaraciones a radio América, el prelado Monseñor Lozano consideró que la iniciativa, que abrió una fuerte polémica al trascender algunos de sus artículos, «afecta a la sociedad, así que debería ser debatida con gente vinculada a la Justicia, pero también a lo social».
Lozano dijo que es «importante» que el servicio penitenciario «sirva para poder enmendar conductas y promover la inserción en la sociedad de quien delinquió» y no sea sólo un lugar donde «simplemente se pasa el tiempo».