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Congelamiento de Precios

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A un mes y medio del inicio del nuevo acuerdo de precios lanzado por el Gobierno nacional, que congela los valores de 500 productos en supermercados adheridos, Rubén Martos, presidente de la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom) evaluó la medida y consideró que como herramienta “dejó de tener sentido desde el momento en que hay otras marcas que ofrecen iguales productos a precios más económicos”.

“Partamos de la base de que el congelamiento no existió en Córdoba, ya que cuando uno quería acceder al producto, había falta de stock”, expresó, para luego cuestionar: “¿Qué sentido tiene congelar precios si hay otras marcas que los ofrecen más barato? En épocas en las que la gente cuida el dinero, no hay marcas que valgan. No tiene sentido congelar primeras marcas cuando hay segundas, más económicas”.

Asimismo, criticó el plan para impulsar el kilo de pan a $ 10 y el “Ropa para Todos”. Con respecto al primero, opinó que genera “competencia desleal”, porque “opera como los subsidios diferenciados: benefician a algunos panaderos y no a todos. Es como el otro programa nacional ‘Ropa para todos’ (si es que hubiera existido)”, indicó.

En ese sentido, cuestionó el alcance de la frase “para todos”. “Cuando se hacen escalas a los que no acceden realmente todas las personas de todo el país, genera problemas entre los comerciantes”, subrayó. De todos modos, enfatizó que sus críticas, “lejos de lo político, mi defensa es en nombre de los comerciantes” e insistió en que “todo esto genera inequidad, intranquilidad respecto de lo que pueden hacer como empresarios”.

En este contexto, lógicamente Martos fue pesimista en cuanto al futuro de las ventas minoristas. “En el futuro inmediato no se puede mejorar lo que hasta ahora no se recuperó. Este es un año en el que se debiera corregir el curso de la actividad económica por tratarse de un período preelectoral en el que las políticas tienden a mejorar las condiciones generales. Sin embargo, hasta el momento estamos estancados. Si no se cambió hasta ahora, no va a suceder nada en el futuro inmediato. Por lo tanto, creemos que las ventas van a seguir estacionadas o levemente por debajo del desempeño del año anterior”, consideró.

Antes de que termine el corriente mes, los electrodomésticos habrán aumentado entre 3,5% y 9%. Así lo anticipó en diálogo con Punto a Punto Radio el presidente de la cadena Saturno Hogar, Luis Alcázar.

“Los precios se venían manteniendo hace 6 o 7 meses pero, a partir de entre el 15 y el 30 de junio, los fabricantes fueron autorizados a aumentar. Normalmente es un 3,5% en el caso de los productos masivos, 7% en los intermedios y 9% en los de alta gama. En los próximos 10 ó 15 días estos aumentos van a estar”, afirmó Alcázar.

En tanto, el empresario descartó que se puede armar, al menos por ahora, una “canasta congelada” de electrodomésticos similar a la de 500 productos que impulsó el Gobierno nacional. “Nosotros no somos formadores de precios, sólo compramos y, si nos cobran más, automáticamente tenemos que aumentar, es inevitable. Cuando mueve el proveedor, no hay alternativas”, explicó.

-¿Qué esperan para los próximos 6 meses?
– Todo el mundo piensa que, después de este aumento, el Gobierno va a intentar no tocar más nada hasta octubre y, después, esperemos que no haya ningún impacto fuerte. Como estamos con inflación, es lógico que el gobierno trate de mantener los precios en cepo. De alguna manera se dará después algún ajuste. Pero es difícil proyectar a largo plazo. 

Desde el último sábado entró en vigencia el congelamiento de precios en los grandes supermercados, que incluye el plan “Mirar para Cuidar”, que en Córdoba tendrá al Movimiento Evita como uno de sus principales órganos ejecutores.

Para conocer cómo hará esta Agrupación K para controlar el cumplimiento de los precios, Punto a Punto Radio dialogó con uno de sus referentes, Martín Apaz, que contó algunos detalles de cómo se cristalizará la iniciativa en la provincia.

Según Apaz, la aplicación del plan se hace de dos maneras. La primera es a través de acuerdos con los municipios para ir con inspectores “con la lista de los 500 productos a los mercados adheridos a este programa, con diferentes representantes de las organizaciones que se han acercado, para controlar los acuerdos de precios”.

Sin embargo, el intendente Ramón Mestre decidió no adherir a esta iniciativa, algo fuertemente cuestionado por el Movimiento Evita, y por eso en Córdoba se utilizará la segunda modalidad que consiste en que “cuando no se cuenta con un convenio con el municipio, se hace a través de la Ley de Defensa del Consumidor que nos permite, por la obligación que tienen por ley de publicar los precios los comercios, tomar registro de los mismos y compararlos con los publicados en la pagina www.consumidor.gov.ar”.

Concretamente, el dirigente señaló que “lo que nosotros vamos a hacer es controlar en las primeras cadenas que adhirieron una lista de 50 productos, con un muestreo de 15 supermercados: ocho en la capital y el resto en el interior. Vamos a estar informando de forma quincenal a los medios y  vamos a estar formulando las denuncias pertinentes a través de la Secretaria de Comercio Interior”.

En tanto, Apaz insistió en que los acuerdos son por cadena y recomendó a la población ingresar a www.consumidor.gov.ar y controlar los precios. “Es muy fácil hacerlo. Tiene un buscador e imprime un ticket con el que podés controlar comparándola con tu ticket del supermercado”, completó.

Detectan faltantes

Paralelamente, la Defensoría del Pueblo de Córdoba señaló hoy que ha constadado algunos faltantes de productos que integran la nómina de precios congelados.

El director del Instituto de Estadística de la Defensoría, Raúl Olocco, habló en Radio Universidad y dijo: “Nosotros no hicimos relevamiento de clientes. De los 500 productos que supuestamente están congelados, tomamos unos 40 y dentro de ese listado corto detectamos que algunos no estaban y casos, como en el de la leche, que había marcas más baratas que las indicadas en el listado”.

La Secretaría de Comercio Interior difundió hoy, vía la agencia Télam, las listas de 500 productos “congelados” acordados por el Gobierno nacional con las nueve cadenas de súper e hipermercados que participan de este acuerdo: Walmart, Carrefour, Jumbo, Disco, Plaza Vea, Coto, Cooperativa Obrera, La Anónima y Libertad.

Los listados de cada una de esas marcas, son los siguientes:

Carrefour
Jumbo, Disco y Plaza Vea
WalMart
Coto
La Anónima
Libertad
Cooperativa Obrera

“Los listados fueron elaborados a partir de lo consensuado con cada una de estas grandes cadenas, y se espera que, como ya lo han anunciado las Cámaras que agrupan a autoservicios y supermercados más chicos, el resto de los comercios adopten como propias a alguna de las listas acordadas”, agregó Télam.

En tanto, se supo también que quienes quieran participar del plan de control de precios, en el marco del plan “Mirar para Cuidar” podrán denunciar si existen aumentos a la línea gratuita 0800-666-1518 que comenzará a funcionar a partir de este sábado.

La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, puso en marcha el plan “Mirar para cuidar” que tiene como objetivo controlar el cumplimiento del congelamiento de precios de 500 productores.

Entre otras cosas, la mandataria aseguró que este programa se efectivizará en 50 ciudades de todo el país que representan a 19 millones de personas. Es decir, que más de la mitad de la población – 40 millones– quedará afuera del plan oficial, y de las palabras de Cristina se desprende que esto sucederá en los pueblos más pequeños del interior, donde de hecho las grandes cadenas no llegan.

“Esto no es una organización del Gobierno, el Gobierno quiere que la sociedad se organice”, indicó y luego dio algunos detalles de la iniciativa. Entre ellos, mencionó que “los militantes que controlen los precios irán acompañados por un inspector, quien está institucionalmente habilitado para hacer la tarea”.

La jefa de Estado amplió que ya se está capacitando gente, pero apuntó que no hace falta demasiada preparación si se tiene en cuenta que irán con un listado y sólo deberán comprobar que los precios son los mismos. En ese sentido, dijo que lo que se necesita para el plan es “primero solidaridad, segundo voluntad y tercero alguien que organice y controle”.

En ese sentido, enfatizó que “todos tienen que participar, incluso los empresarios” y exhortó particularmente a la Iglesia Católica a formar parte de los controles.

El Gobierno nacional apura por estas horas el armado de la canasta de 500 productos que permanecerán con sus precios “congelados” durante los próximos meses, aunque como suele suceder con estos planes lanzados desde la Capital Federal, el impacto en el interior será diferente.

Según Benjamín Blanch, vicepresidente de la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Córdoba (Casac), en la provincia el listado sería de entre 200 y 300 productos como máximo. “Aunque la lista final todavía no se conoció, de la primer nómina que se conoció hay más de 200 productos de marcas que sólo se venden en Buenos Aires. Por eso aquí la canasta sería más chica”, destacó Blanch en diálogo con Punto a Punto.

En cuanto a qué valor serán congelados, Blanch reiteró que eso todavía no está del todo claro. Si bien desde el Gobierno aseguran que se mantendrán los valores de febrero, en el sector supermercadista estiman que habrá retoques de entre 6 y 9%, que fueron los que autorizó la Secretaría de Comercio Interior a lo largo de 2013.

El listado final, el finde

Según la subsecretaria de Defensa del Consumidor, María Lucila “Pimpi” Colombo, la lista de 500 productos se dará a conocer antes del fin de semana próximo y remarcó que “cada una de las cadenas de supermercados va a informar cuál es su listado de precios”, al tiempo que precisó que “todos los locales de cada supermercado van a tener el mismo precio para cada producto”.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció ayer el lanzamiento del plan Mirar para Cuidar, que consiste básicamente en el armado de cuadrillas de militantes del kirchnerismo que saldrán a controlar que los precios no se “descongelen”, aunque la idea es que cualquier persona pueda denunciar los aumentos.

Así lo reconció el dirigente de la agrupación kirchnerista “La Güemes”, Hugo Vaca Narvaja, que en diálogo con el programa “Todo Pasa” de Punto a Punto Radio contó algunos detalles preliminares de los objetivos que persigue esta iniciativa y de cómo será su implementación.

– ¿Cómo tomaron este llamado a la militancia para controlar?
– Primero hay que aclarar que existe un acuerdo de precios con supermercadistas y la idea es que el acuerdo se extienda durante todo el año, pero se ha constatado que, a pesar que de palabra se encuentran congelados, han tenido movimiento. Así, como todo lo que hace este gobierno, como la democratización de la justicia, ahora va a haber una democratización del control de precios. Se va a permitir que cualquier ciudadano vaya al supermercado y si constata que se han movido los precios, va a poder denunciarlo y, si se constata que es así, se aplicarán sanciones.

– ¿Qué sucederá con los supermercados que no acuerdan con el congelamiento?
– Lo que pasa es que los supermercados son el aumento macro (sic), pero si no hay aumento en los súper, ¿por qué tendría que haberlo en otros sectores? El problema del control de la inflación, porque en definitiva estamos hablando de eso, pasa por ver cuál es el origen del aumento de precios. Lo que está haciendo el Gobierno es tratar de ampliar controles sobre la formación de precios. Obviamente que esto no ha pasado de un anuncio y todavía no esta instrumentado. Todavía lo que yo les cuento no pasa de una hipótesis.

– ¿Cuando comenzarían los controles? ¿Cómo los piensan organizar?
– Estamos esperando directivas para la militancia. Vamos a ver cómo se instrumenta y qué tipo de control va a ser; sobre qué sectores. Hasta el día de la fecha no tenemos mayores precisiones.

La inflación existe y es del 25%

La entrevista con Vaca Narvaja también arrojó una sorpresa: un dirigente vinculado al kirchnerismo que admite la existencia de la inflación y también reconoce que es del 25% y no del 10% como sostienen los funcionarios del Ejecutivo.

– ¿No hay un reconocimiento implítico de la inflación al mandar a la militancia a controlar?
-Siempre ha habido un reconocimiento de la inflación por parte del gobierno. Desde que se hace el acuerdo con supermercados, se la trata de morigerar…

– Pero el reconocimiento es del 10% y no del 25%, como es en realidad…
– Sí, es así.

Tras el congelamiento de precios que rige desde febrero, el Gobierno nacional trabaja un nuevo acuerdo con las grandes cadenas supermercadistas para imponer precios “tope” a unos 500 productos que se ofrecen en las góndolas.

La noticia, que surgió a modo de rumor el viernes, fue confirmada por el titular de la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Córdoba, Ricardo Brasca. “Tenemos conocimiento a través de la Asociación de Supermercados Unidos de Buenos Aires, que está integrada por las grandes cadenas, que están avanzando un acuerdo para fijar un acuerdo de precios por 500 productos, no por el 100 por ciento como era el que estaba hasta hoy”, señaló el empresario a radio Nacional.

Según Brasca, propietario de la cadena cordobesa Cordiez, este nuevo acuerdo entraría en vigencia desde el 1º de junio y se extendería hasta agosto o setiembre. “Va a ser por 90 días”, agregó el dirigente.

En este contexto, Brasca admitió que, aunque aún no hay demasiados detalles y recién se está confeccionando el listado de productos involucrados, seguramente los precios se “descongelarán” un poco, acompañando la inflación. “La canasta posiblemente sufra algún pequeño ajuste”, dijo Brasca y recordó al respecto que desde la secretaría de Comercio Interior que encabeza Guillermo Moreno “estaban autorizando aumentos de entre un 3 y un 7%”.

Por último, Brasca también reconoció que “el acuerdo anterior funcionó bien”. “Hubo ajustes en algunos productos estacionales, como las verduras o los lácteos, pero dentro de todo funcionó bastante bien”, completó. 

Cuando se anunció el congelamiento de precios en los supermercados, no fueron pocos los especialistas que señalaron que dicho plan no tendría efecto en los sectores más humildes debido a que los mismos no compran en grandes superficies si no en almacenes y tiendas barriales.

Pasados dos meses de esta política intempestiva de Guillermo Moreno, el relevamiento mensual que hace el Centro de Investigaciones Participativas en Políticas Económicas y Sociales (Cippes) demuestra que lo que muchos pronosticaban.

“Los precios de los alimentos siguen subiendo y de manera importante. En este último mes lo han hecho un 4%. Nosotros medimos el Indice Barrial de Precios, que mide la canasta básica de alimentos de 50 productos, y tiene la particularidad que la miden los vecinos de barrios humildes, en lugares donde compran habitualmente. La inflación sigue afectando a la población más pobre”, señaló en Punto a Punto Radio el director del Cippes, Alfredo Schclarek Curutchet.

Según esta entidad, una familia tipo necesita como mínimo $ 1.928 para no ser indigente, mientras que la canasta básica total, que incluye productos como vivienda y transporte, esta en $ 4.398. “Estos aumentos de precios están afectando a la pobreza. En lo que va del año, los precios de la canasta llevan subiendo alrededor del 10%”, agregó el economista.

– ¿A qué le atribuye esta suba?

– Hay varios factores. En principio, estamos en medio de un proceso inflacionario que no se ha detenido, sigue su curso y el congelamiento de precios no está teniendo efecto, por lo menos en los lugares que nosotros relevamos. Después hay un componente local cordobés, porque la canasta básica que nosotros relevamos en varias provincias como Salta, Chaco, Tucumán o Mendoza, da más alto en Córdoba. Sin lugar a dudas, hay algunas medidas del gobierno provincial, como la tasa vial y los aumentos de impuestos, que impactan.

Los problemas que manifiesta la economía son cada vez más graves y, en ese sentido, hasta una de las empresas estatales los reconoce, pese a que quienes representan a su principal accionista suelen esquivar siquiera mencionarlos.

Se trata de YPF, que en su último informe anual presentado ante la Securities and Exchange Commission (SEC), que es el equivalente a la Comisión Nacional de Valores (CNV) pero en la Bolsa de Nueva York, evidencia incertidumbres en torno a la economía local.

Según publica Infobae, “el regulador del mercado bursátil estadounidense recibió un reporte que hace foco en la preocupación de la empresa por la inflación y un congelamiento de precios que impactan en las posibilidades de generar nuevas inversiones”.

Concretamente, el informe de YPF señala que “en años recientes, el país se ha enfrentado con presiones inflacionarias” y cita los datos del Indec de los últimos cinco años, aunque luego admite que “ciertos analistas del sector privado” creen que la inflación es “significativamente más alta”.

“En más de un punto, YPF deja entrever dudas a partir de tres palabras que funcionan como un prefacio a ciertas características de la economía argentina: ‘No podemos asegurarles, no podemos predecir, no podemos saber’”, señala Infobae.

Asimismo, el documento señala que la inflación puede aumentar los costos de operación e impactar de forma negativa en los resultados y la condición financiera de la compañía. Y agrega: “No existen garantías de que la tasa de inflación no sea más alta en el futuro”.

Congelamiento anti inversiones

El reporte de YPF, en tanto, también cuestiona el congelamiento de precios de las naftas al reconocer que “capacidad para subir los precios se ha visto limitada” y que, por esa razón, “los precios que podemos obtener para nuestros productos afectan, entre otras cuestiones, a la viabilidad para invertir en nuevas exploraciones, desarrollo y refinación”.

“No podemos asegurarles que la empresa podrá aumentar los precios domésticos de los productos (…), ni que estos precios coincidirán con los aumentos o caídas en los precios internacionales o regionales”, asegura YPF.

El cepo cambiario también es señalado como un “factor de riesgo” para los accionistas estadounidenses. “Estamos sujetos a controles cambiarios y de capital”, sostiene el informe y luego manifiesta que los resultados operacionales están expuestos a las fluctuaciones monetarias y a “cualquier devaluación del peso”. “No podemos predecir si, y en qué medida, el valor del peso podría depreciarse o apreciarse frente al dólar”, remarca.