(DyN – Télam) – El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró que «no hay cláusulas secretas» en el acuerdo firmado entre YPF y Chevron para la explotación de Vaca Muerta.
«Lo de Chevron es parte de más de lo mismo. No hay nada nuevo bajo el sol. No hay cláusulas secretas, hay cláusulas de confidencialidad, en virtud de que se trata de dos empresas que cotizan en la bolsa de Nueva York», respondió Capitanich.
El ministro aseguró que “esas cláusulas de confidencialidad forman parte de la operatoria típica de una inversión de esta naturaleza”, y señaló que tienen que ver con “los mecanismos de solución de controversias” en cuanto a la “selección de una jurisdicción, la que tiene que ser compatible o amigable para ambas partes” y “las perspectivas de inversión y de remisión de utilidades”.
Al respecto, insistió en que “forma parte de las acciones habituales y ordinarias, en los mecanismos de inversión, en materia hidrocarburífera” este tipo de convenios. Sobre ello, puntualizó que “se trata de una inversión de alto riesgo, que está vinculada a una etapa de exploración, la que puede producir o no el hallazgo de un yacimiento que permita garantizar el retorno de la inversión”.
“Si uno explora y no encuentra nada, pierde todo lo que invirtió, si encuentra un yacimiento cuya productividad garantiza el reparo de la inversión y la exploración de riesgo, entonces tiene que tener un horizonte temporal para garantizar la recuperación de la inversión”, consideró.
En su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, afirmó que las versiones sobre el asunto provienen «de los mismos opositores de siempre, que están financiados por otras petroleras, que a su vez pretenden obstaculizar el desenvolvimiento autónomo e independiente de la Argentina, para lograr autoabastecimiento».
“En este oficio nos conocemos todos, y todos sabemos cómo funcionan las operaciones de prensa. Mienten hasta en el pronóstico del tiempo”, ironizó el funcionario.
El jefe de Gabinete adjudicó las versiones publicadas por los diarios Clarín y La Nación -que hablaron de supuestos acuerdos secretos entre YPF y Chevron- a «operaciones de prensa» de los grupos mediáticos concentrados, que «nunca se cansan de extorsionar a los gobiernos de turno».
Según consideró Capitanich, este tipo de informaciones publicadas en los diarios constituyen «un refrito permanente de este tipo de consideraciones, en las que opinan los mismos opositores de siempre, financiados por empresas petroleras que pretenden obstaculizar que Argentina logre el autoabastecimiento energético».
«Son operaciones de prensa que tienen la base clara de ser una cortina de humo; porque nadie dice nada del convenio que Argentina firmó con Suiza, por medio del cual se detectaron más de 4 mil cuentas, de las cuales sólo 123 están declaradas», afirmó.
«Ni tampoco dicen nada de la Comisión Bicameral que debe crearse en el Congreso respecto a transacciones de sobrefacturación y subfacturación de exportaciones. Nadie dice nada que este gobierno debió soportar 9 corridas cambiarias», añadió.