El Centro de Innovación Tecnológica Empresarial y Social (CITES) que pertenece al Grupo Sancor Seguros y funciona como inversor de capital emprendedor incubando empresas científico-tecnológicas, acaba de anunciar una inversión de más de US$ 500 mil en un método para detectar el cáncer de una forma más precisa y menos agresiva respecto de los métodos tradicionales.
Se trata de biopsias líquidas que requieren sólo una extracción de sangre en los pacientes.
La inversión será a través del financiamiento a una startup, llamada Epiliquid, creada por la mendocina Quinto Impacto y científicos del Conicet, que aportará herramientas oncológicas de precisión para tratamientos específicos y personalizados para pacientes con cáncerEl desembolso se va a concretar en un plan de trabajo de 30 meses con objetivos alineados hasta lograr validaciones técnicas, pre-clínica y patentamientos para comenzar a realizar los ensayos clínicos en pacientes.
Cada año se diagnostican 18 millones de casos de cáncer en todo el mundo, de los cuales 9,6 millones terminan en la muerte. Sin embargo, las posibilidades de un tratamiento exitoso aumentan drásticamente si se detecta la enfermedad en una etapa temprana, lo que permite elevar las posibilidades de curación en pacientes hasta un 90% y una reducción de tratamientos invasivos del 70%, explican en el CITES.
Sin embargo, esta situación también implica un inconveniente: los métodos para la detección y el diagnóstico del cáncer de colon, mama y ovario actualmente no son lo suficientemente sensibles, son costosos e incluso dolorosos para los pacientes que padecen esta enfermedad, señalan.
En este sentido, la propuesta de Epiliquid promete introducir un método de diagnóstico disruptivo a través de una plataforma de diagnóstico sensible que permite la detección de estas patologías en etapas más tempranas con la idea de aumentar las posibilidades de curación.
“Epiliquid proporcionará herramientas oncológicas de precisión, que permitan tratamientos oncológicos específicos y personalizados que salven vidas, dinero y dolores innecesarios. El objetivo a medio plazo es ver nuestra tecnología en las directrices internacionales de tratamiento para pacientes con cáncer”, señala Nicolás Tognalli, CEO de CITES.
La tecnología de la plataforma de diagnóstico se basa en un sistema de detección que se conoce como “biomarcadores epigenéticos”, que combinan las últimas herramientas para procesar ADN (biología molecular de primer nivel) con algoritmos bioinformáticos de última generación. Con esto pretende obtener información de los tumores de manera sensible y específica, explicó el experto.
En tanto Rafael Kemelmajer, cofundador de Epiliquid, agrega: “Esto es particularmente importante desde el punto de vista preventivo y curativo, ya que al detectar el cáncer en estadios tempranos, las estrategias terapéuticas son menos agresivas e incluso aumenta significativamente la posibilidad de curación”, dice.
De esta manera, a través del sistema, es posible detectar los biomarcadores en sangre de los pacientes con cáncer, lo que se conoce como biopsias líquidas, que presentan como ventaja ser estudios poco invasivos y sin riesgos asociados al procedimiento ya que, para el paciente, consiste en una simple extracción de sangre.
“Si tomamos al cáncer de colon como ejemplo, el método de screening utilizado actualmente es la colonoscopia. Este estudio implica riesgos derivados del procedimiento en sí mismo, de la anestesia y factores propios del paciente, quienes en algunas ocasiones no están en condiciones de someterse a dicho estudio”, comenta Kemelmajer.
De esta manera, la inversión del CITES está pensada para que Epiliquid se enfoque en el proceso de desarrollo y validación tecnológica para comenzar a realizar los ensayos clínicos en los pacientes.
Una vez alcanzadas las aprobaciones a cargo de los organismos regulatorios, tanto nacionales como internacionales, la compañía buscará que este método sea accesible a la mayor cantidad de personas en el mundo.
“Estamos convencidos de que en pocos años estas tecnologías -hoy novedosas- van a ser empleadas en la práctica médica de rutina, complementando o en algunos casos reemplazando a las técnicas tradicionales”, concluye Tognalli.