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Con la llegada del 2016, Arcos Dorados, la franquicia más grande el mundo de McDonald’s y quien opera la marca en Latinoamérica, creó una hamburguesa diferente. Se trata de ClubHouse, un producto de excelencia con el que la marca pone un pie en el mercado gourmet de hamburguesas. Se trata de una verdadera nueva creación de McDonald´s que es parte de la nueva plataforma Signature de la marca y que incluye un nuevo pan artesanal tipo brioche, bacon rústico, cebolla grillada, queso cheddar suave, rodajas de tomate, lechuga y una salsa especial.
McDonald’s apunta a ofrecer distintas opciones para las diferentes necesidades de clientes. En el caso de ClubHouse, se trata de una creación que combina los mejores sabores de McDonald’s con ingredientes especialmente seleccionados y forman esta nueva hamburguesa gourmet.
“La búsqueda de propuestas y distintas variedades de hamburguesas es una tendencia que se viene construyendo hace algunos años y, actualmente, se hace más visible. Desde McDonald’s lo celebramos y, por eso, también nos subimos a esta nueva tendencia” afirma Lucas Fernandez, Director Divisional de Marketing para la región Sur de Latinoamérica de McDonald’s.
Según la consultora de estudios de mercado Euromonitor, el mercado de restaurants de Comidas Rápidas en Latinoamérica representará alrededor de 65.000 millones de dólares en 2016. Dentro de este mercado, las hamburguesas representan aproximadamente 16.000 millones, lo que equivale a un 25 % del mercado. McDonald’s es la marca líder de este mercado, con más de 2100 restaurantes en la región y posee alrededor del 10 % de participación en el mercado (el competidor más cercano posee un 3% de participación).
En los últimos años, el segmento de mercado de hamburguesas gourmet que va en busca de comida rápida de autor para encontrar sabores únicos y diferentes en hamburguesas, creció considerablemente y para McDonald’s, siendo líder del mercado en Latinoamérica, representa es un segmento target.

A menos de un mes de las Eliminatorias Americanas de la Copa Louis Lesaffre –el gran encuentro de la panadería- la Selección Argentina de Panaderos está lista para defender la celeste y blanca en una competencia que sólo admite a los mejores del continente.
Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador,México y Uruguay se medirán en nuestro país para tratar de lograr una plaza en el Mundial de la Panadería en Francia (2016).
Luego de transpirar la camiseta durante largas jornadas de entrenamiento “a puro bollo”,  el equipo argentino compuesto por Gastón Miño (Capitán y representante de la categoría Bollería), Pablo Salvatierre (en la categoría Baguette) y Jorge Tragidis (en categoría Artística), junto a Sergio González (el Coach del equipo) y Oscar Caballero (la Joven Promesa de la Panadería), la juegan de local sin dejar ni un centímetro de ventaja a
sus adversarios.
Para sortear las duras pruebas del reglamento francés, Miño, Salvatierre y Tragidis cuidarán “nuestro arco” en torno a tres categorías: “Pieza Artística”; “Bollería y Panificación Gourmet”; y “Baguette y Panes del
Mundo”. Las pruebas serán evaluadas por un distinguido jurado internacional. Dicho Jurado,  que es el mismo para todas las Eliminatorias continentales está  presidido por Pierre Zimmermann acompañado de Christian
Vabret como Presidente Honorario,  a ellos se suman tres expertos internacionales en la materia que serán los jurados técnicos.
Finalmente, un jurado nacional se abocará a definir las “menciones especiales del campeonato”.
En tanto, la “Joven Promesa de la Panadería” competirá en forma individual, trabajando en la confección de un menú infantil, para calificar su desempeño se convocó al  Jurado más exigente de la competencia compuesto
por niños de 7 a 12 años, que será implacable a la hora de elegir al mejor.
El torneo se realizará desde *el viernes 29 de mayo hasta el miércoles 3 de junio* y el debut albiceleste será el día *sábado 30 de mayo*, ese será el día de la verdad para una selección nacional que sin lugar a dudas
dejará todo en la cancha. El mismo reto se replicará en las cuatro esquinas
del planeta: la zona Americana, la zona Mediterránea de África, la zona
Europea, y la zona del Pacífico Asiático.

El presidente del Centro de Industriales Panaderos de Córdoba (Cipac), Néstor Romero, advirtió que, a raíz de las fuertes subas de precios provocadas por el encarecimiento de la harina, por primera vez desde la crisis económica de 2001 el consumo de pan está cayendo en la provincia.

“Sí, se han contraído las ventas. Desde el 2001 hasta la fecha no había ocurrido una baja como la que hemos tenido los últimos 3 meses, que en Córdoba está en un 15 o 20% de reducción en el consumo. Los clientes llevan menos”, dijo Romero en Punto a Punto Radio.

Romero adjudicó a esta situación a la fuerte inflación que vive el precio del pan. “El 1º de enero nos costaba 100 pesos la bolsa de harina, hoy cuesta 400. Es un aumento desmedido, no tiene explicación”, se lamentó. 

Y continuó su análisis: “Si suben la harina, forzosamente tenemos que subir el pan. Lo que nosotros queremos es que la gente vuelva a llevar el pan hasta su mesa. Desde enero hasta junio, nos tragamos un 170% del aumento para que el pan le llegue a todos y recién ahí hicimos el aumento. El pan no es un vaquero, ni un par de zapatillas. Pero acá hay 4 o 5 pícaros que manejan el trigo y que hacen estos desbarajustes que tenemos con los precios”. 

– ¿Hay una estimación de cuánto puede llegar a costar el kilo en diciembre?
Preguntame el número de la quiniela, pero no el precio del pan. Estamos trabajando en el día a día, nunca nos ocurrió esto. Yo creo que hay que pensar en todos, que el pan llegue a todos, pero somos el último eslabón de la cadena, no sabemos qué pasa al medio. Lamentablemente no podemos hacer nada.

La fuerte suba del precio de la harina, como consecuencia de la escasez de trigo, ha sido uno de los principales temas del año. Panaderos y fabricantes de pastas ya no saben qué puerta tocar para intentar solucionar este problema y, lo peor para ellos, es que las noticias para el mediano plazo lejos están de ser esperanzadoras.

Es que, según la Bolsa de Cereales de Córdoba, el incipiente optimismo que se había generado luego de conocerse un aumento del 12% en la superficie sembrada en la provincia con el cereal, se derrumbó al conocerse que la producción final rondaría las 927.238 toneladas, lo que significa un volumen 16% menor con respecto al ciclo 2012/2013.

Así, sería la peor performance en cuatro años, apenas superando la campaña 2008/2009, que fue una de las peores de la historia ya que sólo se obtuvieron 300.000 del cultivo clave para la elaboración de los alimentos más básicos para el humano.

El motivo de esta baja es una fuerte reducción del rendimiento por hectárea, producto de la escasez de lluvias combinada con las altas temperaturas. “El estado general del cereal se encuentra muy comprometido, observándose que a nivel provincial cerca del 80% del área se encuentra de Regular a Malo, debido al estrés hídrico y térmico por el que viene atravesando el ciclo del cultivo”, subrayaron desde la Bolsa.

Arrendamientos en baja

Paralelamente, la Bolsa de Cereales mostró otros datos que exhiben a las claras el mal momento que atraviesa el agro. En este caso, se trata de una merma en los precios de los alquileres en casi todas las regiones productivas, menos el departamento Marcos Juárez, en plena zona núcleo.

“De acuerdo al segundo relevamiento realizado por el Departamento de Información Agroeconómica a la red de colaboradores, los costos promedio de arrendamiento 2013/2014 caerían un 14%, continuando de esta manera una tendencia bajista iniciada la campaña anterior”, mencionaron desde la Bolsa.

Ese es el promedio de reducción en quintales por hectárea, mientras que el costo de arrendamiento expresado en dólares por hectárea se reducirá aún más (28,7% en promedio) debido a la expectativa de un menor valor de la soja a mayo de 2014.

(Agencia DyN) – Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) culpó a la política «intervencionista» y «anti-exportación» del gobierno nacional por el bajo resultado de la actual campaña de trigo que, estimó, «no superará las 10 millones de toneladas, una de las más bajas de los últimos años».

«El resultado de esta campaña de trigo ya se conocía desde hace tiempo, y no sorprende por previsible: no superará las 10 millones de toneladas, una de las más bajas de los últimos años», señaló.

La entidad afirmó en un comunicado que Argentina produce «al 50 por ciento» de su potencial «y se han perdido mercados externos a raíz de la política anti-exportación, siendo la menor en los últimos 30 años».

«Cuotas de exportación, intervenciones, precios máximos y otras políticas atroces fueron destruyendo paulatinamente a la producción triguera, demoliendo un mercado competitivo y expulsando al 50 por ciento de los productores que antes se dedicaban a esta producción», fustigó.

La institución conducida por Rubén Ferrero planteó que «un mercado normalizado le podría abastecer de más 3.000 millones de dólares anuales a una economía cada vez más necesitada de divisas». Asimismo, CRA denunció que, en este escenario, «casi diariamente surgen problemas graves para abastecer el consumo interno de los argentinos, convirtiendo al pan en un bien cada vez menos accesible para los bolsillos».

A modo de ejemplo, citó que «la distorsión es tan grande que hoy los argentinos en las panaderías pagan el pan más caro que lo que lo pagan los ingleses en su país, en tanto que el ingreso per capita de un argentino representa la mitad del ingreso de un inglés».

«Con la continuidad de estas políticas, la destrucción del trigo es lo único que este Gobierno puede garantizar», concluyó.

La suba del precio del pan es, hoy por hoy, uno de los principales temas en cada mesa argentina. La decisión del Gobierno de aplicar la Ley de Abastecimiento hizo aparecer algo de harina y bajar los precios, empezándose a comercializar –a medias– el pan a $ 10 el kilo.

Mientras los kirchneristas culpan a los productores por “especular” con el precio del trigo, desde el campo contestan que el problema fue la mala campaña pasada que fue así, entre otras cosas, por las malas políticas que lleva adelante la Casa Rosada.

En este contexto, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) emitió un informe que le otorga más razón a los productores que al Gobierno. “La última campaña tuvo una caída de la superficie de siembra, que ya se venía evidenciando hace varios años. La caída es 32%. Además, los rendimientos tampoco fueron  muy elevados y esto llevó a una caída de la producción aún mayor, de 38%”, señaló Valentina Bulgareli, economista del Iaraf, en declaraciones a Punto a Punto Radio.

En ese sentido, para Bulgareli “por más de que hablen de Ley de Abastecimiento, en realidad lo que se ve es que hay menos trigo. La producción fue claramente inferior. En ese punto no se han fijado”.

Con respecto a lo que viene en la campaña que está por comenzar, la economista subrayó que las estimaciones “serían un poco superiores a las de este año, pero tampoco es que sea un factor fundamental”.

De todos modos, los primeros números auguran un mejoramiento de la situación en relación a lo ocurrido durante la última campaña. Por caso, la Bolsa de Cereales de Córdoba realizó su segunda estimación de siembra de trigo que arrojó una implantación estimada de 539.000 hectáreas, superando en un 11,6% a las 483.116 del ciclo pasado.

De cualquier manera, esta perspectiva favorable deja de serlo tanto cuando se recuerda que el promedio histórico de las últimas seis campañas fue de 700.000 hectáreas, con lo cual la siembra de este año estaría 23% por debajo de este último guarismo.

 

La Secretaría de Comercio informó hoy que se emplazó a los exportadores de cereales para que en el lapso de 48 horas normalicen el mercado de trigo, e indicó que si esto no ocurre se aplicará la ley de Abastecimiento.

Fuentes de esa repartición remarcaron a Télam que si el mercado no se normaliza, el viernes se implementará la ley de Abastecimiento y se procederá a decomisar el trigo en existencia para volcarlo en el mercado, a los molinos que lo soliciten, al precio de paridad de exportación.

En rigor, esta posibilidad ya había sido deslizada ayer por el ministro de Agricultura de la Nación, Norberto Yauhar, quien aseguró que «el trigo va a alcanzar» para abastecer al consumo interno, al tiempo que advirtió que existe un excedente del cereal que «estamos esperando que se ponga a disposición del mercado», y que si esto no sucede «el Estado tomará medidas».