Etiqueta

ricos

Browsing

¿Quién fue la persona más rica de toda la historia? ¿John Rockefeller o Bill Gates? ¿O ninguno de ellos? La prestigiosa revista norteamericana Time entrevistó durante horas a historiadores y economistas para elaborar un ranking, algo difícil teniendo en cuenta la necesidad de comparar entre diferentes períodos de tiempo y sistemas económicos.
10. Genghis Khan vivió entre 1162 y 1227 y fue un guerrero y conquistador mongol. Unificando a las tribus nómadas de esta etnia del norte de Asia, fundó el primer Imperio mongol, el contiguo más extenso de la Historia. La mayor cantidad de su riqueza estaba basada en tierras. A pesar de su gran poder, los académicos aseguran que nunca atesoraba su fortuna, sino que su generosidad fue clave para su influencia. «Él nunca construyó un palacio para él o para su familia, ni un templo, ni una tumba, ni una casa», explicó el autor del libro Genghis Khan y la creación del mundo moderno.
9. Bill Gates nació en 1955 en Estados Unidos y acumula una fortuna de u$s79,9 mil millones. El famoso fundador de Microsoft es actualmente considerado la persona más rica del mundo.
AFP
8. Alan Rufus vivió en Inglaterra entre 1040 y 1093. Sobrino de Guillermo el Conquistador, se unió a su tío en la conquista de Normandía. Su riqueza llegó a los u$s194 mil millones.
7. John D. Rockefeller vivió entre 1839 y 1937 en Estados Unidos. Acumuló una fortuna de u$s341 mil millones. Comenzó a invertir en la industria petrolera en 1863 y en 1880 su Standard Oil controlaba el 90% de la producción petrolera norteamericana.
6. Andrew Carnegie vivió en Estados Unidos entre 1835 y 1919. Pese a que Rockefeller es mucho más famoso y recibe la atención del mundo, este hombre fue el norteamericano más rico de la historia. Inmigrante escocés, vendió su compañía US Steel a JP Morgan por 480 millones de dólares en 1901, lo que equivale a un 2,1% del PBI del país.
5. Joseph Stalin vivió entre 1878 y 1953. Cuando murió, era el hombre todopoderoso de la Unión Soviética. Controlando totalmente a la URSS, acumuló un 9,6% del PBI mundial. Se trató de un dictador que, con el poder absoluto, también controló a una de las economías más grandes del planeta. Si bien es difícil separar su riqueza personal de la de la URSS, su combinación de poder económico y el control completo de la potencia lo ubican como una de las personas más ricas de todos los tiempos. Pese a que no todo el dinero de la URSS le pertenecía, tuvo la capacidad de aprovechar el poder económico soviético a su antojo.
«Él tenía un enorme poder, por medio del cual podía obtener lo que quisiera», dijo George Liber, profesor de historia de la Universidad de Alabama en Birmingham. «Controló 1/6 de la superficie terrestre sin ningún contrapeso», explicó.
4. Akbar I, de la India, vivió entre 1542 y 1605. Conocido como Akbar el Grande, controló el Imperio mogol –que representó un cuarto de la producción económica mundial- desde 1556 hasta su muerte. Es considerado el mayor de los emperadores mogoles.
3. El emperador Song Shenzong vivió entre 1048 y 1085 en China. Su fortuna estaba basada en el dominio de un imperio que controlaba entre el 25% y el 30% del PBI Mundial. La dinastía Song (960-1279) fue una de las económicamente más poderosas de todos los tiempos. La riqueza del imperio provenía tanto de sus innovaciones tecnológicas como de su extrema habilidad para la recaudación tributaria.
2. César Augusto (63 a.C. – 14 d.C.) acumuló lo que hoy serían unos 4,6 billones de dólares. No sólo estuvo a cargo del Imperio Romano, que llegó a representar enrte el 25% y el 30% de la producción económica mundial, sino que según a algunos estudiosos se hizo de una quinta parte de la economía de su imperio. «Durante un tiempo, todo Egipto era propiedad suya», dijo el profesor de la Universidad de Stanford, Ian Morris.
1. Mansa Musa, de Malí, vivió entre los años 1280 y 1337. Simplemente, fue la persona más rica de la historia. Rey de Tombuctú, fue el mayor productor de oro del mundo. Y eso, en un momento en que la demanda de oro era especialmente alta, lo transformó en el ser humano más adinerado de todos los tiempos. ¿Qué tan rico fue? Es difícil responder a la pregunta con números concretos. Si es que existen, los registros son escasos. «Pero el punto es que este fue el hombre más rico que jamás nadie haya visto», explica el reconocido profesor de historia de la Universidad de Muchigan, Rudolph Ware. Sus riquezas eran tan grandes que la gente luchaba para describirlas, relata Ware.
«Están tratando de encontrar palabras para su fortuna. Hay fotos suyas sosteniendo un cetro de oro en un trono de oro con una taza de oro con una corona de oro en la cabeza. Imagina todo el oro que usted piensa que un ser humano podría poseer y duplícalo», dijo.
 
Fuente: Infobae

Los 400 hombres más ricos del mundo perdieron, en conjunto, US$ 70 mil millones el martes debido a la caída de las bolsas mundiales, incentivada por la crisis griega y el miedo al efecto contagio.
De acuerdo al Billionaries Index (Indice de personas con una fortuna de más de mil millones de dólares) de la agencia Blooomberg y que reproduce el sitio web de Apertura, en promedio cada uno perdió una cifra aproximada de US$ 175 millones.
El español Amancio Ortega, creador de la marca ZARA y el hombre más rico de Europa (su fortuna personal asciende a los US$ 69,2 mil millones), fue el que tuvo peor suerte con una caída del 3,2 por ciento en las acciones de la empresa y una pérdida de US$ 2,2 mil millones solo en un día. El inversor estadounidense Warren Buffett, perdió US$ 1,6 mil millones, en tanto Bill Gates -la persona más rica del mundo- tuvo una pérdida de US$ 1,4 mil millones.
Solo doce personas, lograron aumentar sus ingresos ayer. Uno de ellos es Aliko Dangote (número 59 en la lista de los hombres más ricos del mundo y es el más poderoso de África). Su empresa, Dangote Cement, consiguió subir un 2,35 por ciento y obtuvo ganancias por US$ 180 millones, haciendo que la fortuna del nigeriano ascienda a US$ 15,3 mil millones.
Aunque el mercado le dio un golpe duro a las 400 personas más ricas del mundo (en promedio sufrieron una baja del 1,5 por ciento), no tardarán en recuperarse. En conjunto, manejan una fortuna de US$ 4.2 billones. Para ponerlo en perspectiva eso es, en comparación, unos US$ 400 mil millones más que el Producto Bruto Interno de Alemania.

Viaje al fondo del mar
Submarino
A muchos les fascinaba la idea de explorar los fondos marinos cuando eran niños. Y algunos de los que se lo pueden permitir terminan haciéndolo cuando ya son adultos.
Entre los famosos que poseen un submarino se encuentra el magnate británico Richard Branson, propietario de la aerolínea y las otras 359 empresas que conforman Virgin Group.
En su momento planeó llevar turistas a las Marianas, la más profunda fosa oceánica conocida y el lugar más profundo de la corteza terrestre, situada en el fondo del Océano
Pacífico noroccidental.
Además tiene un Necker Nymph, un vehículo sumergible de cabina abierta, anclado en su isla privada.
Por su parte, el director de cine canadiense James Cameron donó su submarino Deepsea Challenger para la investigación científica.
Si quieres seguir el ejemplo de estos aficionados a los sumergibles y no tienes problemas económicos, puedes.
La empresa Triton Submarines, con base en Florida, Estados Unidos, se especializa en pequeños y lujosos submarinos. Funcionan con baterías y los suelen personalizar según los gustos de cada cliente.
El modelo más popular de la compañía es el Triton 3300/3, de acuerdo a Harley O’Neill, el gerente de ventas y marketing, y se utiliza con fin recreativo, para la exploración e investigación, así como para rodar películas.
Tiene cabida para tres personas y puede sumergirse a una profundidad de 1.006 metros (3.300 pies, de ahí el nombre). «Solían ser los aviones y ahora son los submarinos», dice O’Neill. «Todo el mundo pregunta si tienes uno».
¿Y existen requisitos previos para poder adquirir uno de estos?
Sí, hay que tener un superyate para acoplarlo a él, señala O’Neill. El precio del Triton 3300/3 más básico es de US$3,6 millones, e incluye el entrenamiento para cuatro pilotos, según informa el sitio BBC.
 
Vuelo sobre las olas
Agua
Culpen a Peter Pan, pero muchos adultos hechos y derechos aún siguen soñando con volar. Aunque no en avión, sino como pájaros.
Quizá de niños bajaban al jardín, a simular el vuelo aleteando con los brazos, o saltaban desde la rama más baja de un árbol en un intento de despegar. Hay quien incluso se llenó de moretones o se rompió una extremidad en el intento.
Para algunos de estos, ya en edad adulta y sedientos de adrenalina, el vuelo libre sigue siendo una necesidad y la satisfacen haciendo paracaidismo o salto libre, por ejemplo.
Pero existen otras alternativas para volar que no incluyen un avión o un puente para saltar de él.
El Jetovator, un aparato diseñado por la empresa Hammacher Schlemmer, es una de estas alternativas.
Se trata de una especie de moto de agua de propulsión a chorro que permite volar sobre las olas, elevando al usuario hasta 7,6 metros a una velocidad de 40 kilómetros por hora. Para ello se sirve de una manguera de 10 metros que succiona el agua de mar, lago o río.
Además, Jetovator también funciona bajo el agua y permite sumergirse hasta a tres metros.
Su precio, eso sí, no es para todos los bolsillos: US$7.000.
Como en el Gran Prix
gran prix
No se trata de los coches de carrera en miniatura con los que jugaban la mayoría de los niños.
Las pistas de Slot Mods USA están hechas a la medida de cada cliente y algunas partes reproducen con precisión circuitos reales, como el de Le Mans o el del Gran Premio de Mónaco, explica David Beatti, el fundador y presidente de la compañía.
Suelen medir entre 3,7 y 9 metros de largo y entre 3 y 6 metros de ancho, y pueden incluir tribunas entre otras estructuras, así como marcas de neumáticos hechos con aerógrafo sobre el asfalto.
Dependiendo del tamaño, el alcance y los detalles de la pista, la empresa puede tardar entre tres y seis meses en construirla.
Entre los que se animaron a hacerse con uno de los productos de Slot Mods hay entusiastas del motor con garajes llenos de coches de lujo y modelos de coleccionista, pero también famosos del mundo de las carreras, como el piloto estadounidense Bobby Rahal.
Y ahora trabajan en un circuito a medida para el conocido presentador de la televisión estadounidense Jay Leno, informa Beattie.
Sea cual sea el perfil de cada cliente, lo que todos ellos tienen en común es un amor de muchos años por las carreras de autos.
«Cuando les entregamos la pista, todos parecen niños en la mañana de Navidad», explica Beattie. «Es como traerles de regreso su niñez».
Sin embargo, la vuelta a aquellos maravillosos años tiene un precio. Y es alto: US$50.000 el modelo básico. Aunque generalmente los productos de Slot Mods USA terminan costando entre US$125.000 y US$150.000, de acuerdo a su presidente. El precio incluye 12 coches, así como la instalación.
Golf sin cansarse
Golf
El carro de golf Hovercraft hace que ese deporte sea aún más cómodo, ya que es capaz de volar sobre los obstáculos de agua y arena del campo.
Se eleva a hasta 23 centímetros del suelo y puede desplazarse a 72 kilómetros por hora.
El vehículo tiene cabida para cuatro pasajeros y dos bolsas con palos. No tiene volante y se dirige con un manillar.
Además cumple con los estándares de seguridad para la navegación sobre el agua de la Guardia Costera de Estados Unidos.
Eso sí, es necesario un permiso especial para adquirirlo. Aunque el fabricante, Hammacher Schlemmer, asegura que es silencioso y que no estropea la hierba del campo.
Su precio es de US$58.000.
A vista de dron
Dron
Los drones o aparatos voladores teledirigidos parecen estar por todas partes. Y gracias a la alta tecnología, ofrecen cada vez más posibilidades.
Por ejemplo, permiten a los usuarios grabar los alrededores desde las alturas.
«Es divertido hacerlos volar, además de cada vez más sencillo, y su estabilidad mejoró», dice el director ejecutivo de la empresa Brookstone, Tom Via, a través del correo electrónico.
Uno de los modelos más solicitados de la compañía es un cuadricóptero, el Brookstone Parrot BeBop.
Éste y el resto de drones constan de una cámara de alta definición con lente ojo de pez o gran angular que puede controlar el piloto.
La cámara graba el video a 1080 píxeles y tiene una capacidad de 14 megapíxeles de imágenes fijas para captar la acción de los alrededores.
También cuenta con un sistema GPS que permite localizarlo en caso de que se estrelle.
Su precio es más accesible que los juguetes anteriores: US$499,99.

(Télam) – Bill Gates volvió a encabezar la lista de los hombres más ricos del mundo, según el ranking que anualmente elabora la revista Forbes.
El fundador de Microsoft quedó adelante del mexicano Carlos Slim, ya que su fortuna se eleva a los 79.200 millones de dólares y la del magnate mexicano de las telecomunicaciones llega a los 77.100 millones.
La revista atribuye a Gates, de 59 años, una fortuna de 79.200 millones de dólares, mientras que a Slim, de 75 años y que lidera el grupo de telecomunicaciones América Móvil, le calcula 77.100 millones de dólares, indicó la agencia de noticias EFE.
Entre las veinte personas más ricas del mundo figura un español, el empresario Amancio Ortega, fundador del grupo textil Inditex y dueño de la cadena de indumentaria Zara, entre otras, que quedó en cuarto lugar, un puesto por debajo de la posición que tuvo en la lista del 2014.
Por su parte, el inversor estadounidense Warren Buffett, de 84 años, que preside la firma Berkshire Hathaway, figura en tercer lugar con una fortuna de 72.700 millones de dólares, mientras que al empresario gallego Ortega, de 78 años, le atribuye 64.500 millones de dólares.
En el décimo puesto de la lista se ubica la francesa Liliane Bettencourt, de 92 años, del grupo L’Oreal, a quien  Forbes le calcula una fortuna de 40.100 millones de dólares.
De los veinte primeros hay cuatro integrantes de la familia Walton, dueños de la cadena minorista Walmart, que ocupan los puestos 8 (Christy Walton), 9 (Jim Walton), 11 (Alice Walton) y 12 (S. Robson Walton).
El más joven entre los veinte primeros millonarios es Mark Zuckerberg, creador de Facebook, de 30 años, que ocupa el puesto 16 y a quien Forbes le calcula una fortuna de unos 33.400 millones de dólares.

(AP) – El operador de bonos Ben Eiler cambió la vida en suburbio de Georgia por una isla en el Caribe, y ni siquiera tuvo que pedir un visado.
Eiler, de 38 años y nativo de Arkansas, forma parte de las al menos 250 personas que aceptaron la invitación de Puerto Rico a ciudadanos estadounidenses acomodados para mudarse a la isla y disfrutar de la vida sin impuestos sobre las plusvalías, una oferta tentadora para los que viven de las inversiones.
Eiler vive en una comunidad cerrada en la costa sureste de Puerto Rico y tarda menos de 5 minutos de casa a la oficina, atravesando cuidados jardines con una gran vista del océano.
«Conducir al trabajo en sandalias y un carrito de golf no está mal», comentó entre risas.
El semiautónomo territorio estadounidense marca su propia política fiscal, y los residentes no pagan impuestos federales sobre los ingresos ganados en el país.
Sumido en una recesión durante casi una década y con una tasa de desempleo del 13%, más del doble que el total de Estados Unidos, decidió en 2012 intentar atraer a inversionistas acomodados que probablemente comprarían costosas propiedades, establecerían negocios y crearían empleo.
La Ley 22, que estableció el programa, exime a la gente de impuestos sobre ganancias por plusvalías amasadas desde que se instalan en la región, y proporciona una exención de impuestos locales sobre dividendos e intereses si se instalan de forma permanente, entre otras condiciones. Un folleto del gobierno lo resume como «Sol, arena y cero impuestos».
«Francamente, para los estadounidenses, es algo sin precedentes», comentó Alex Daley, estratega de inversiones en tecnología que se mudó con su esposa desde Vermont en diciembre de 2013.
Daley dijo sentir que el territorio continental de Estados Unidos se ha vuelto más hostil en materia fiscal con el gobierno del actual presidente, Barack Obama. «Intentan tener cautiva a la gente con más movilidad y más acomodad», dijo Daley sobre el gobierno. «A la gente le está enfadando eso».
Sin embargo, la ley está produciendo una cierta controversia en Puerto Rico, especialmente los trabajadores de clase media, inmersos en dificultades económicas y que pagan impuestos en la isla por ingresos no procedentes de inversiones. Otros dicen que la estrategia ayuda a erosionar la base de ingresos fiscales del gobierno federal estadounidense al desviar ingresos del continente.
Además, algunos economistas señalan que los nuevos residentes no bastarán para rescatar a la isla de sus profundos problemas económicos. Una estrategia más inteligente sería ampliar la base que tributa, señaló Barry Bosworth, economista de la Brookings Institution en Washinton.
«En cambio, Puerto Rico dedica mucho tiempo y esfuerzo a atraer a una subpoblación que quiere trato especial y busca evitar impuestos en el continente», dijo. «Da la impresión de estar a la venta».
Un informe reciente de Standard & Poor’s emitió otra advertencia: «Si Puerto Rico tiene demasiado éxito promocionándose como un paraíso fiscal, en nuestra opinión es probable que el Congreso estadounidense imponga restricciones».
Sin embargo, por ahora se han aprobado las solicitudes de al menos 500 personas, la mitad de las cuales ya se han instalado, como Eiler. Antes de mudarse con su familia sólo había visitado brevemente el lugar, pero encuentra el entorno familiar.
«Tenemos un Walmart y Costco y P.F.Chang’s», comentó.
La llegada de estos nuevos residentes contrasta con otra tendencia en dirección opuesta. De 2010 a 2014, la población de Puerto Rico descendió un 5% a 3,5 millones de personas, según la Oficina del Censo de Estados Unidos. Muchos de los que se fueron son profesionales de clase media, expulsados por la falta de oportunidades económicas y los altos costes de vida.
Aunque los boricuas no pagan impuestos sobre la renta a Estados Unidos, salvo por la Seguridad Social y Medicare, tienden a pagar el equivalente en impuestos sobre sus ingresos al estado. El tramo más oneroso, para los que ingresan más de 62.000 dólares, es del 33%.

«El 1% más rico ha visto su cuota de aumento de la riqueza global, de un 44% en 2009 al 48% en 2014», dice Oxfam en un informe publicado este lunes.
A ese ritmo, los más ricos poseerán más del 50% en el próximo año, según el informe.
«¿De verdad queremos vivir en un mundo donde el 1% posee más que el resto de nosotros juntos?» preguntó Winnie Byanyima, directora ejecutiva de la agencia de ayuda internacional, según informa el sitio CNN en español.
“La desigualdad global es simplemente asombrosa”
Byanyima copresidirá el Foro Económico Mundial en Davos esta semana. Planea usar el foro para pedir medidas urgentes sobre la desigualdad creciente.
Las 80 personas más ricas del planeta tienen la misma riqueza que 3,500 millones de pobres, dice el informe.
«La magnitud de la desigualdad mundial es simplemente asombrosa; y a pesar de los problemas apuntan a la agenda global, la brecha entre los más ricos y el resto va en rápido aumento», dijo.
«Es hora de que nuestros líderes enfrenten los poderosos intereses creados que se interponen en el camino de un mundo más justo y más próspero».
Llamado de atención
Mientras que el 1% de la población posee el 48% de la riqueza del mundo, la mayoría restante sigue la misma tendencia. «Del 52% restante de la riqueza mundial, el 46% es propiedad del resto de la quinta parte más rica de la población mundial», dice el informe.
El resto de la población solo posee el 5,5% de la riqueza mundial.
¿Su riqueza el año pasado? Un promedio de 3.851 dólares por adulto, dice el informe.
«Élite global»
Mientras tanto, los miembros de la «élite global” tuvieron una riqueza media 2.7 millones de dólares cada uno el año pasado.
El informe se produce un día antes de que el presidente Barack Obama dé a conocer las propuestas que cierran exenciones de impuestos a los ricos.
El presidente dará a conocer sus planes para ayudar a la clase media durante su discurso del Estado de la Nación el martes.

En el enrarecido mundo de los ricos, la madera es la nueva materia prima de moda.
Según Dennis Moon, jefe de la gestión de activos especializados de U.S. Trust, una división de Bank of America (BAC), cuyo trabajo es encontrar, administrar y talar parcelas de árboles para los clientes acaudalados de la empresa.
Desde la crisis financiera, el negocio está en auge, ya que las familias ricas han trabajado incansablemente a fin de diversificar sus inversiones más allá de las acciones y los bonos tradicionales.
Ésta es la razón por la que el 1% adora la madera y todo lo ecológico que la acompaña, según informa el sitio CNN en español.
Inversión conservadora: después de ver sus carteras afectadas por la recesión, muchas personas ricas se han enfocado en las clases de activos que no suben y bajan con los mercados bursátiles. Ahí es donde la madera entra en juego.
«Preferirían que esto fuera su tipo de activo conservador y cuidadoso», dijo Moon, quien reside en Dallas. «Les gusta la transparencia. Puedes ir a verlo si quieres. No es igual a un pedazo de papel financiero como una acción o un bono».
Muchos clientes terminan visitando su terreno, y algunos incluso lo usan con fines recreativos como cazar y pescar. Otros construyen cabañas de troncos, «para alejarse del estrés del mundo», como Moon lo describe.
Cómo funciona: ser propietario de tu pequeña sección del cielo de la madera no es barato. La inversión mínima en madera de U.S. Trust es de 5 millones de dólares, aunque con eso comprarás un par de miles de acres en distintas parcelas, la mayoría de las cuales están ubicadas en el Sureste, el Noreste del Pacífico y Nueva Inglaterra.
Los árboles más antiguos que están más cerca de la cosecha normalmente cuestan más que los árboles jóvenes a los que les falta mucho antes de estar listos para ser talados.
Una vez estén listos para la cosecha, U.S. Trust negociará la mejor oferta con las compañías madereras, y luego supervisarán el proceso para asegurarse de que los árboles sean talados en una manera eficiente y adecuada para el medio ambiente.
«Los clientes pueden involucrarse si quieren, o simplemente ser espectadores», dijo Moon.
Sé paciente mientras esperas los resultados: medir los resultados de las inversiones en madera no es sencillo.
Los precios de la madera en sí están muy relacionados al mercado de la vivienda y no han regresado a sus niveles previos a la recesión, señaló el Dr. Robert Abt, un profesor de economía forestal en la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
Señaló que incluso ahora que la industria de bienes raíces se ha recuperado de la crisis, gran parte de la nueva construcción se está desarrollando en casas multifamiliares, las cuales normalmente requieren la mitad de la madera.
«Si no estás correlacionado con el mercado bursátil, pero estás altamente correlacionado con el mercado de viviendas, no hay mucha diferencia», dijo.
Abt sugirió que los posibles inversionistas se informen fuera del banco al hablar con expertos independientes en la ingeniería forestal. La ubicación, afirmó, es la clave, debido a que el terreno maderero que está más cerca de fábricas de papel y aserraderos normalmente tiene un flujo de efectivo más confiable.
También cree que el terreno maderero está sobrevaluado en este momento, porque la demanda de los inversionistas en años recientes ha aumentado los precios.
Pero Moon insiste en que la madera es una inversión a largo plazo, y que la mayoría de los clientes la ven como una herramienta para transferir riqueza de una generación a otra. Si bien es cierto que los árboles más jóvenes no necesariamente proporcionan ingresos directos, dijo que los propietarios a menudo cubren los gastos mediante la concesión de licencias de caza y la venta de corteza de pino, que se utiliza comúnmente en el diseño de jardines.
«Si vendes demasiado pronto, no permites que el motor biológico trabaje para ti tanto como deberías», dijo.
Los inversores también pueden beneficiarse de la apreciación de la tierra, a la que muchos ven como una protección contra la inflación a largo plazo.
«No estamos jugando el juego de las materias primas… estamos tomando la tierra en propiedad», dijo Moon.

La forma en que los ricos usan sus ahorros es lo que los diferencia del resto.
Un ejemplo de esto es Joshua Coleman. Cuando su familia vendió su compañía de telecomunicaciones por US$400 millones en 2004, no se apresuró a gastar toda la plata en algo extravagante.
Al contrario: empezaron a estudiar la forma de invertir el dinero y hacerlo crecer, y entonces Coleman tuvo una idea. En 2011 lanzó una empresa que permite a la gente conectarse con expertos legales y en riqueza.
Si el negocio va bien y un día lo vende, podría ganar tanto como su familia con su primera venta, según informa el sitio BBC.
Quienes tienen al menos US$30 millones en el banco invierte en acciones y bonos, pero también hacen crecer su dinero comprando otras empresas e invirtiendo en valores inusuales, como fondos de arrendamiento de aviones.
Aunque uno no tenga tanta plata, podemos aprender de cómo los ricos invierten. He aquí algunas pistas sobre la clave de su éxito
¿Invierten en cosas sólo para ricos? A lo mejor no…
Los ricos tienen acceso a una cantidad de posibilidades de inversión que el común de los mortales ni siquiera sospechamos que existen.
Los fondos closed-end, un tipo de inversión en la que el dinero no se toca por al menos 5 años, ofrecen mucha rentabilidad e interés.
Otros negocios no son tan evidentes como podría parecer. El alquiler de aviones es uno de ellos y un negocio incipiente, afirma Ian Marsh, CEO de una compañía de inversiones londinense.
Su firma trabaja con una empresa que se llama Doric, que se dedica a comprar aviones que son alquilados a grandes compañías aéreas.
Los inversores obtienen buen dinero cuando los aviones se venden, e incluso pueden ganar un 9% anual en intereses solo por el alquiler.
Inversores de alto perfil están también empezando a comprar granjas, ya que al crecer la población, y con ella la demanda de alimentos, este tipo de negocios puede resultar muy rentable, afirma Marsh.
El especialista añade que la tierra de calidad puede aportar un 4% de interés al año, además de incrementar su valor a lo largo del tiempo.
Compran más empresas, por supuesto
Esto es algo natural para los ricos: ya que muchos hicieron su fortuna comprando compañías, es normal que sigan haciéndolo. Coleman invierte en otras firmas, mayormente en el sector servicios y de tecnología.
Tiene participaciones en tantas que no puede ni dar un número exacto.
«Son muchas», afirma.
Normalmente hace negocios con un grupo de inversores y una firma de capital riesgo, y en el futuro pondrá más de US$1 millón para hacerse con parte de una operación.
Es divertido ver cómo las compañías pasan de la nada a hacerse enormes, y muchos inversores tienen la experiencia y las conexiones para hacer que esto suceda, dice David Rose, un emprendedor neoyorquino.
«Imagina invertir en Google cuando todavía estaba en el garaje», dice. «Puedes ver a los fundadores de la firma cada semana y ser testigo del día a día de la empresa, lo que puede resultar muy divertido», añade.
Aunque estos son casos que conllevan algo de riesgo – el 50% de las startups se quedan en nada – los inversores suelen ganar 20 o 50 veces lo que pusieron si una compañía tiene éxito.
Tienen hobbies carísimos
Invertir en lo que les apasiona, ya sean obras de arte, autos, relojes, vinos o incluso instrumentos musicales es algo muy común entre los muy ricos, afirma Guy Hudson, director ejecutivo de una gestora de riqueza global.
Aunque se espera que estos bienes suban de valor con el tiempo, también se compran para usar o disfrutar.
Y a aquellos que compren de forma inteligente, sus hobbies le pueden reportar cuantiosos beneficios. De acuerdo con la compañía de Hudson, el valor de las «inversiones en pasiones» creció cerca del 15% en 2013.
Otra manera más económica de adquirir este tipo de objetos es asistir a subastas, por ejemplo.
Alimentan el hambre de propiedades
Muchos de los que se encuentran en lo alto de la pirámide de la riqueza gustan de «aparcar» sus bienes en propiedades, afirma Paul Patterson, de una firma de gestión de riqueza canadiense.
Algunos juntan su plata con otros para adquirir propiedades comerciales, mientras que otros buscan departamentos de lujo en lugares como Londres o Nueva York.
Muchos intentarán revender lo que compraron, aunque mientras tanto lo usan como hogar de vacaciones.
Aunque la gente común no podrá permitirse nunca un departamento de lujo en una ciudad como Nueva York, sí que podrán adquirir propiedades en su barrio, para alquilar o vender cuando los precios hayan subido.

Los multimillonarios tienden a unirse a un club exclusivo, comprar el equipamiento más sofisticado y escoger deportes que requieren desembolsar una gran cantidad de dinero.
Así lo sostiene un informe de la BBC, que cita a Thomas Corley, autor de «Hábitos Ricos», un libro sobre las prácticas de los individuos muy solventes.
«A la gente rica le gusta andar con otros de su misma condición. «El deporte además los puede ayudar a desarrollar sus contactos. Unirse a un club es una buena manera de afianzar relaciones», analiza Corley según señala la BBC.
Incluso cuando parece que los ultrarricos practican los mismos deportes que el resto de los mortales, si uno se fija con atención se dará cuenta de que no es así: no juegan de la misma manera o por las mismas razones.
Golf: negocios y caridad sobre el green
Para jugar al golf, todo lo que se necesita es un palo, una bola y un agujero. Pero los más ricos del mundo no suelen estar dispuestos a compartir el día con la gente común y corriente en un espacio público. En cambio, prefieren ser socios de un club en el que después de jugar puedan almorzar con gente con un historial similar al suyo.
«Ser miembro de un club de golf cuesta cientos de miles de dólares», dice David Friedman, el presidente de Wealth-X, una agencia con sede en Singapur que genera información relativa a los multimillonarios.
De acuerdo con Golf Magic, una página web para entusiastas del golf, una membresía puede costar entre US$18.755 en Archerfiel Links, en Escocia, y US$392.000 en Liberty National, en Nueva Jersey, Estados Unidos. El 10% de los más ricos del mundo juega al golf, según Wealth-X.
Esquí: chalets, laderas y emociones
Con un salario medio (de países desarrollados) se puede disfrutar del esquí. Por ejemplo, un bono de dos días para las pistas de Aspen Snowmass, en Colorado, Estados Unidos, cuesta US$238.
Los más ricos, sin embargo, suelen alquilar un avión privado y volar a Courchevel, en Francia. Estos también suelen querer tener su propio chalet en la nieve y comprar el mejor equipamiento. Y los que no compran una casa escogen alojarse en un resort u hotel de lujo.
De acuerdo a las investigaciones de Corley, el 12% de los individuos más ricos del mundo posee una casa en una zona de esquí. El porcentaje es alto, teniendo en cuenta que sólo el 1,6% de la población general practica este deporte.
Kabaddi: el deporte de los multimillonarios de India
Para algunos multimillonarios no es suficiente practicar su deporte favorito: necesitan poseer el equipo completo. Así, no es inusual que aficionados ricos compren equipos de baloncesto o fútbol.
La última tendencia entre los ultrarricos de India es, sin embargo, el kabaddi. Es una especie de lucha libre por equipos y se ha practicado durante décadas. Cada equipo, de cinco jugadores, debe capturar a un miembro contrario y volver a su lado de la cancha.
Los miembros atrapados tienen que salir fuera del área de competición. El atacante no debe respirar durante el ataque. Para demostrarlo, debe cantar en forma ininterrumpida. De ahí viene el nombre del juego: «kabaddi» significa «canto» en India y Paquistán.
Es un juego antiguo pero últimamente no es extraño ver a estrellas de Bollywood y grandes ejecutivos acudir a los torneos. Los millonarios indios no lo practican, pero poseen los equipos que compiten en la Liga Pro Kabaddi.
Sin embargo, comparado con otros deportes, ser dueño de una agrupación no es tan caro. Dirigir un equipo de kabaddi puede costar unos US$820.000 al año, relativamente económico si se compara con los más de 1.000 millones de dólares que cuesta comprar un equipo profesional en Estados Unidos y Europa y los cientos de millones que hace falta para mantenerlo.
Vela: relajación o intensidad
El único contacto que la mayoría de la gente tiene con la vela es cuando este deporte es televisado a raíz de los Juegos Olímpicos o la Copa América. Pero para los ultrarricos puede ser una relajante actividad de fin de semana.
De acuerdo a la investigación de Corley, el 38% de los individuos más ricos del planeta navegan «y les encanta». La mayoría pesca y se relaja. «Puede ser como meditar», señala.
Pero algunos prefieren la competición. Esto se puede hacer sin invertir mucho, con un pequeño barco de segunda mano. Aquellos con un patrimonio de millones de dólares, por el contrario, suelen gastar miles en yates.
Así lo asegura Paddy Boyd, director ejecutivo de Sail Canada, una asociación que promueve la navegación. Un yate suele costar entre US$50.000 y US$200.000, dependiendo del tamaño.
Si éste mide más de 24 metros de longitud, su precio será superior a los US$10 millones. Pero no es suficiente con comprar un barco. También se necesita una tripulación.
Además, están las tasas del club, los costos de amarrar el yate en un puerto y su mantenimiento. Participar en una competición regular cuesta entre US$20 y US$250. Y si son profesionales US$1.6000 o US$2.000.
Hípica: el deporte de los reyes
La hípica se conoce como «el deporte de los reyes». Si bien es posible comprar un caballo por unos cuantos miles de dólares, los más codiciados suelen costar millones.
En septiembre de este año la Keenland Association, con base en Kentucky, Estados Unidos, vendió 13 potros (caballos de menos de un año) por valores en torno a US$1 millón; dos de ellos por US$2,2 millones.
Una vez adquirido el animal, se necesita un entrenador, que suele cobrar unos US$37.000 al año, pagar al veterinario y asumir los costos de alimentación, transporte y demás. Si se suma todo, uno podría gastar más de US$100.000 al año.
Lamentablemente, con todo ello no se asegura un caballo ganador. En 2006 un grupo de ricos británicos pagó US$16 millones por The Green Monkey (El Mono Verde). Tras perder tres carreras consecutivas, el caballo fue retirado de la competición.
En la mayoría de las carreras el ganador se lleva unos US$100.000. «Pero los ricos no tienen caballos para recuperar su inversión», asegura Jill Mullvihil, director de comunicación y relaciones públicas del National Thoroughbred Racing Association, en EE.UU. «Lo hacen porque aman a estos animales y el deporte».

¿Disfrutarías los medios sociales más si no estuviera aquel 99 por ciento molestos que se quejan de los pagos de su hipoteca y las facturas elevadas de cable? Por apenas 9.000 dólares, Netropolitan está aquí para ayudar.
Para ser miembro, los usuarios tienen que soltar 9.000 dólares para cuotas y membresía, luego otros 3.000 dólares al año, de allí en adelante.
Si todo eso parece una broma – una elaborada estrategia en una era cuando Facebook, Twitter y otra serie de redes sociales son gratuitas – el hombre detrás de la idea asegura que no, según informa CNN en Español.
«Esto es 100% real, y yo creo que hay una necesidad y un público para este servicio», dijo James Touchi-Peters, fundador de Netropolitan.
Touchi-Peters, 48, un compositor y ex-conductor de la Orquesta Filarmónica de Minnesota, dijo que tenía problemas encontrando gente con quien se podía relacionar en otros sitios sociales.»Yo vi una necesidad para un ambiente donde puedes hablar de las cosas más finas de la vida sin reacciones violentas – un ambiente donde la gente puede compartir gustos y experiencias similares», dijo él.
La cuota inicial elevada, dijo, «garantiza que nuestra membresia siga exclusiva, pero también privada».
Los miembros deben tener 21 años de edad y deben registrase usando sus nombres reales. Una vez entran, ellos pueden formar grupos alrededor de intereses comunes, pero tendrán acceso a mensajes y actualizaciones de estado por todos los otros usuarios.
No hay anuncios, el sitio no tiene índice con los motores de búsqueda, y los moderadores están activos en todo momento para vigilar comportamiento no deseado (como anuncios tipo spam para tu propio negocio).
Hacer clic en un botón omnipresente llamará a un «Socio de Servicio para Miembros» para proporcionar ayuda con el sitio en cualquier momento. Ese es un servicio especial que las personas en Netropolitan, aunque quieren estar seguros que la clientela no abusará de ello de manera anticipada.
«Por favor entienda que Netropolitan no es un servicio de portero», lee la sección de preguntas frecuentes del sitio. «Nuestros Socios de servicio para los miembros no te reservarán un avión privado, o encontrarán boletos de un espectáculo de Broadway con entradas agotadas. Existen únicamente para ayudar a los miembros navegar de manera técnica y encontrar lo que necesitan en el club social».