El speaker y consultor Jonatan Loidi fue el disertante de la segunda charla del ciclo organizado por Punto a Punto, la agencia de contenidos Spiquers y el Instituto de Desarrollo Comercial (IDC). La charla tuvo lugar el martes 8 de agosto en La Casona 1891 “El Torreón”, y contó con el apoyo de Copa Airlines, Club Empresario Salvago y Casona 1891.
La disertación de Loidi, titulada “Cómo ser Pyme y no morir en el intento”, se centró en los principales problemas que enfrentan las empresas emergentes, y aportó algunos conceptos clave sobre cómo solucionarlos.
El primer consejo de Loidi para los emprendedores fue “crear espacios para pensar su negocio”. Tomando el ejemplo de Google, explicó el modelo 70-20-10: 70% del tiempo de los empleados debe estar destinado al trabajo, 20% a pensar y 10% al esparcimiento y tiempo libre. Según Loidi “comprar ideas hechas es costoso”, por lo que el tiempo para pensar y generar nuevas ideas debe ser considerado como una inversión y no como un gasto.
Sobre el rendimiento y la sobrecarga laboral, el consultor hizo énfasis en sus efectos adversos, resaltando el valor del ocio y los momentos para la creatividad. “Cuando tenemos un empleado que trabaja bien, tendemos a darle todavía más trabajo, lo que termina agotándolo y en última instancia lo hace improductivo”, explicó, y señaló que el estrés puede hasta llegar a producir Alzheimer.
Sobre las problemáticas más comunes que enfrentan quienes dirigen una Pyme, el conferencista destacó ocho, y explicó cómo enfrentarlas:
“No sé dónde estoy parado”: Reconocer lo que no se sabe, y saber buscar qué problemas tenemos para así poder solucionarlos.
“No sé si gano o pierdo”: Los números son el corazón de la empresa, por lo que tienen que estar sanos para poder concentrarse en otras cosas. Rodearse de buenos asesores financieros.
“Fijo muchos objetivos que no llego a cumplir”: Seguir la regla de menos es más: es mejor fijar pocos objetivos pero cumplirlos, que fijar muchos y después no concretarlos, ya que esto genera frustración y hace que la empresa deje de proyectarse y pierda el rumbo.
“Si me voy, las cosas no se hacen/nadie las hace como yo”: Aprender a delegar y a convivir con el error de los demás, ya que uno también se equivoca, pero se perdona más fácilmente que a los otros.
“Mientras más crezco, más difícil es”: La mayoría de las empresas quiebran cuando toman una decisión de crecimiento porque se vuelven más complejas, por lo que antes es fundamental analizar si podemos enfrentar esa nueva complejidad.
“El día a día me consume”: Estar en todo lleva a una mala administración del tiempo. Aprender a delegar.
“Me siento solo tomando decisiones”: Rodearse de personas idóneas para tomar decisiones en equipo. Contrastar ideas con otros sirve para mejorarlas.
“El gerendete”: Cuando el gerente también ejerce el rol de cadete. Delegar y distribuir tareas.
Loidi también dio dos consejos que considera fundamentales: asignar prioridades y revisar el modelo de negocios. Sobre el primero, destaca la importancia de saber en qué somos buenos, y de rodearnos de gente que es buena en lo que nosotros no. Sobre el segundo, recomienda “caminar de costado”, aprendiendo del pasado y proyectándose al futuro, pero sin perder de vista la situación actual.
Volviendo al modelo de negocio, explicó que “no podemos dejar contento a todo el mundo”, a lo que agregó que “tenemos que saber qué no hacer”. Para esto, recomendó segmentar al público para “no distraernos”, y así además fidelizar a los clientes que ya se tienen antes de salir a buscar nuevos.
Finalmente, aseveró que “el cambio es obligatorio”, y vaticinó el fin de las grandes corporaciones en beneficio de las asociaciones con Pymes, ya que “las corporaciones se resisten al cambio, mientras que las Pymes son ágiles y flexibles, y su mayor activo es la capacidad de reinventarse”.