LA pregunta es si la empresa realmente vale 100.000 millones de dólares. Eso es lo que afirma una fuente cercana al proceso que Xiaomi está desarrollando para llevar su empresa a bolsa a través de una IPO (Oferta Pública de Venta, OPV). Una valoración absolutamente astronómica que extraña por varios motivos.
El más relevante de todos ellos es que a pesar de su potencial, su expansión internacional es muy limitada. Acabamos de verles desembarcar en España, pero los mercados occidentales curiosamente siguen sin poder acceder de forma oficial a la mayor parte de su interesante catálogo de productos.
Expansión internacional limitada
Los responsables de Xiaomi están preparando la salida a bolsa de la empresa, y como indican en Bloomberg entre las entidades financieras que trabajarán para dar ese paso están Morgan Stanley, Goldman Sachs, Credit Suisse o Deutsche Bank.
Xiaomi logró contar con una serie de inversiones notables en 2014 que hicieron que su valoración se disparase hasta los 45.000 millones de dólares, y tras unos malos 2015 y 2016 la empresa logró remontar el vuelo el año pasado, sobre todo gracias a su éxito en India, donde logró rivalizar con un gigante como Samsung.
Su política de expansiones parecía prometedora cuando la empresa fichó a Hugo Barra, pero Xiaomi siguió centrándose en el sureste asiático y algunos países emergentes. Ahora ese proceso parece algo más sólido, como demuestra su llegada a España hace unas semanas, un movimiento que podría replicar en otros países de Europa muy pronto.
Una valoración de récord
En Estados Unidos la empresa no acaba de situarse de forma contundente: comenzó vendiendo algunos accesorios y dispositivos a finales de 2016, y se espera que 2019 sea el año de su desembarco definitivo con la venta de móviles en este país.
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