La negociación entre los partidos independentistas para formar el próximo gobierno de Cataluña arrancó con un problema. No se sabe cómo hacer para que Carles Puigdemont, el candidato más votado entre ellos, pueda asumir la presidencia sin caer detenido por los delitos que le achaca la Justicia española.
Su entorno no cesa de elucubrar planes al respecto.
De hecho, la idea más reciente pretende impulsar un cambio en el reglamento parlamentario para esquivar la obligación de que el candidato a presidir la Generalitat (gobierno catalán) deba asistir a la sesión de investidura para defender en persona su programa.
“No descartamos ninguna hipótesis, incluso una investidura vía Skype”, indicó Jordi Turull, ex vocero del gobierno destituido en octubre por el primer ministro Mariano Rajoy y actualmente diputado electo de la lista Juntos por Cataluña (JxC). De ocurrir, el evento sería inédito en la historia del parlamentarismo europeo: un presidente elegido en ausencia y que gobierna desde el extranjero.
Cabe recordar que Puigdemont se refugió en Bélgica a principios de noviembre con el fin de eludir la causa penal en su contra por rebelión, sedición y malversación vinculada con el proceso que derivó en la fallida proclamación de la independencia catalana. Su ex vicepresidente, Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana (ERC), se quedó en el país y lleva casi dos meses detenido en una prisión de Madrid.
Los delegados de ERC no respaldan la estrategia de Puigdemont. Aceptan darle el apoyo para formar gobierno, pero le exigen que vuelva a Barcelona para asumir su responsabilidad, no importa el riesgo que deba correr. “No se puede tener un presidente por Skype”, advirtió el mediático diputado Gabriel Rufián, después de la primera reunión oficial entre JxC y ERC en el Parlamento catalán.
El ex consejero de Justicia y diputado electo de ERC, Carles Mundó, se explayó aún más. Apuntó que si Puigdemont no regresa debería ser Junqueras quien asuma la presidencia, y argumentan que sería la única manera de reinstalar un gobierno legítimo.
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