La medida de fuerza abarcará a más de 30 aeropuertos del país, incluido el de Córdoba.
Los trabajadores de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) realizarán un paro total de actividades a partir del viernes y por 48 horas en más de 30 aeropuertos del país, incluido el aeropuerto internacional Córdoba.
Adrián Campomasi, controlador de ATE, precisó en declaraciones a Cadena 3 que la medida de fuerza comenzará a aplicarse «desde el viernes a las 6 hasta el domingo a la misma hora».
La medida se tomó en rechazo a un convenio colectivo realizado con la exclusión de ATE, gremio mayoritario en la representación de los trabajadores de la aviación civil.
«Se agotaron todas las instancias porque se trata de una medida (de fuerza) que viene desde mayo. Se compareció ante el Ministerio de Trabajo y la única parte que estuvo presente fue el gremio porque el secretario de Transporte no estuvo y no se pudo resolver el conflicto», aseguró.
Según ANAC, dicho convenio «somete a los compañeros a la ley de contrato de trabajo en detrimento de la estabilidad laboral para los estatales que garantiza la Constitución Nacional y encubre la privatización de distintos sectores de la Administración nacional de Aviación Civil, a través de la puesta en marcha de una empresa que se rige bajo las normas del derecho privado».
La coordinación de ATE-ANAC reclamó la intervención del ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, para destrabar el conflicto.
«El único que pude destrabar esto es el ministro Dietrich para que hable con nuestro secretario general y mande a quines deben resolver el conflicto», añadió Campomasi.
Los trabajadores reclaman que «no hay ningún aeropuerto bajo la órbita del Minsiterio de Defensa» y la recomposición salarial (según precisaron, el pago de acuerdos preexistentes, zona y rediscusión de suplementos).
Además, solicitan la incorporación de personal y pase a planta del personal contratado y la apertura de concursos para ocupar cargos directivos o de gestión
Los controladores aéreos realizarán un paro total que afectará los vuelos comerciales de cabotaje e internacionales, con cancelaciones y demoras.
En ese sentido, sólo garantizaron «la normalidad de las emergencias necesarias de los vuelos sanitarios y oficiales».