“No podemos seguir esperando. El compromiso es de todos pero fundamentalmente de esta nueva generación compuesta por hombres y mujeres audaces, innovadores, comprometidos, que están dispuestos a trazar un verdadero rumbo de desarrollo que trascienda los gobiernos y las futuras generaciones”.
Con esas palabras, el presidente de la Unión Industrial de Córdoba (UIC) se despidió ayer de la conducción de la entidad, ya que en septiembre culmina su mandato y será reemplazado por el actual vicepresidente, Gerardo Seidel.
El último discurso público de Felippa fue en el marco del Séptimo Coloquio Industrial organizado por la UIC, que en dos días congregó a cerca de 1.500 personas que repletaron el Salón Lugones del hotel Sheraton.
“¿Qué tipo de sociedad queremos?” fue el lema de la UIC en el Coloquio de este año y la conclusión de Felippa, que Punto a Punto adelantó esta semana su intención de candidatearse a gobernador, es que “queremos una sociedad diferente, donde la industria ocupe un rol central, ya que es uno de los mejores instrumentos para hacer justicia social y la mejor garantía para que los países puedan crecer y desarrollarse en un sistema equitativo, justo y democrático”.
“No hay antecedentes en el mundo de sociedad que haya tenido un alto nivel de desarrollo inclusivo sin haber desarrollado su industria”, completó el concepto el titular de la cooperativa láctea Manfrey.
Luego, siguió hablando sobre el tipo de sociedad que pretende la UIC: “Una sociedad mucho más comprometida, que no sea indiferente a los hechos de violencia, a la pérdida de valores, a los hechos de corrupción, que revalorice los hombres y mujeres que generan trabajo porque es la única forma de tener un desarrollo sustentable”.
Y continuó: “Una sociedad que entienda que el bienestar sólo se consigue con esfuerzo y trabajo, pero también una sociedad que no sea extremadamente facilista, porque si lo somos, lo que terminamos haciendo es abonar el terreno para los gobiernos populistas”.
Uno de los párrafos más duros de su discurso fue cuando subrayó que busca “una sociedad que no permita que se le mienta permanentemente”. “Hasta a veces da la sensación de que nos gusta, y terminamos cayendo en los patrioterismos que no nos llevan a ningún lado”, disparó.
Críticas a la economía
A la hora de hablar de los problemas que atraviesan la coyuntura para hacer negocios, Ercole fue directo al grano: “Claramente estamos sufriendo las consecuencias de muchas cosas que hace tiempo veníamos alertando”, remarcó.
En ese sentido, recordó que “la respuesta a cada una de nuestras advertencias fueron amenazas, aprietes”, en obvia referencia a hace dos años cuando luego de un duro discurso la AFIP cayó de sorpresa a su hogar para realizar una inspección, por orden del ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
“En los últimos años vivimos una fiesta de consumo y a las fiestas siempre alguien las paga. Ahora nos encontramos sufriendo la resaca después de la borrachera y vaya resaca”, bromeó.
En ese marco, subrayó que “es más importante la generación de la riqueza que la distribución de las mismas” y al respecto reclamó “apostar a la producción, alentar a los que invierten y dejar de demonizar a los empresarios, que no somos los culpables de que haya inflación o desocupación”.
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