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(Enviada especial, El Calafate) En el marco de la presentación de la nueva Fiat Toro -que se concretó en El Calafate- el Presidente de FCA, Cristiano Rattazzi, brindó algunas definiciones sobre su evaluación respecto al contexto económico y político actual y la actualidad productiva de Fiat. A continuación, algunos de sus dichos:

El «efecto dominó» de Brasil en la industria automotriz
«Nosotros dependemos  en un 70 u 80 por ciento del comercio con Brasil», comentó Rattazzi y agregó que debido a la crisis brasilera «al mercado local es posible que tengamos que reducirlo al mínimo de proveniencia de Córdoba».

Sobre esto, explicó: «en el producto hecho en Ferreyra hay mucho traído de Brasil. Esto en el mercado local nos daña mucho con la flex que hay».

En cuanto al impacto en las ventas internacionales, admitió que pretende «que exportar no sea una utopía, que no estemos presos de la situación coyuntural de Brasil». Además, detalló: «esperamos depender no sólo de Brasil. Hoy, tenemos que pensar no sólo en exportar a México, ya que por caso en el 2006 se exportaron  140.000 autos. Hoy somos absolutamente no competitivos. No solamente nosotros, también los brasileros».

El flex como obstáculo y su impacto en Ferreyra
«Si una pieza viene de Brasil nos genera un enorme daño en la cuestión del flex, si viene de México no nos produce ningún daño», criticó Rattazzi.

A su vez, evaluó: «el flex, como principio, me parece una enorme tontería porque lo que tenemos que buscar es integración en el mundo, un mercado normal. El flex es un invento que nadie sabe de dónde deriva y en nuestro caso es posible que si lo volvieran a llevar a 1,90 no es grave, simplemente garantizaría que no se cierren fábricas en Argentina. Pero llevado a 1,5 como está ahora en el caso nuestro puede significar no producir más autos en  Ferreyra para el mercado local, y hacerlo sólo para exportación».

También se refirió al impacto directo del flex en la producción cordobesa: «El mercado local nos hace un daño enorme con un flex tan reducido. Es posible que la decisión tenga que ser dentro de poco de no producir más autos en Ferreyra para el mercado local. Evidentemente es, como siempre, un efecto indeseado de un sistema de regulación que la verdad no sirve».

Desafíos de económicos para Argentina
Según el Presidente de FCA, en el corto plazo es imprescindible que haya  «desregulaciones y una infraestructura que funcione, se produzca la eliminación del flagelo inflacionario y una competitividad que mejore la productividad, no sólo el cambio».

Sobre el vínculo internacional opinó que «tiene que abrirse la cuerda con Europa y es difícil hacerlo, especialmente con la resistencia que tiene Francia».

Rattazzi confirmó que desde FCA «está todo previsto para exportar a otros países pero si hoy se observa la competitividad Argentina, ni a Brasil llegamos».

Sin embargo, destacó el proyecto autopartista que se está tratando en el Congreso «para que el sector se actualice en términos tecnológicos y superar la producción de autos con más del 50% local».

“Si miran la magnitud de esta planta, se darán cuenta de que sólo se puede hacer algo así desde el optimismo”, señaló Mario Rizzi, gerente Comercial de Case Construction Mercosur, en la presentación de un nuevo producto fabricado en la planta que CNH tiene en Córdoba: una retroexcavadora con la que piensan ganar terreno ante el nuevo escenario que se plantea en la obra pública.
La inversión específica del producto es de US$ 8 millones, aunque Rizzi se encargó de remarcar la inversión global de US$ 300 millones que la firma concretó en la planta cordobesa, ubicada en Ferreyra, junto a la planta de FCA e Iveco.  “La empresa es optimista, entendemos que hay en proceso de licitaciones que van a salir en cualquier momento, por lo que las expectativas de reequipamiento tanto en el Estado provincial como en el municipal van a ser importantes. Estamos muy confiados en el potencial del país”, agregó.
La Retroexcavadora 580 N (cavadora y retroexcavadora en el mismo equipo) “es un producto muy versátil, muy apreciado por el mercado en trabajos de soporte en grandes obras nacionales y bastante empleado para viviendas y edificios. Es el típico producto que ocupan mucho las municipalidades e intendencias”, señaló el ejecutivo.
Si bien Rizzi señaló que este año van a producir cerca de 270 equipos, la capacidad de producción de la fábrica podría “triplicar ese número sin ningún problema”. “Para que se tome una dimensión de la empresa, aquí fabricamos tractores. Y podríamos producir hasta 4.000 tractores por año, que es la cantidad que producen todas las marcas en el país”, acotó.

Con la presencia del presidente de la Nación, Mauricio Macri, y del CEO global de FCA, Sergio Marchionne, ayer finalmente se concretó el anuncio de la inversión que la compañía concretará en su planta de Ferreyra, con el objetivo de producir un nuevo modelo sobre una plataforma modular que le permitirá fabricar hasta 100.000 vehículos al año, desde mediados del 2017.
Si bien tanto los directivos de FCA como el presidente no tuvieron contacto con la prensa, fueron varios los detalles que se conocieron ayer, tras los discursos que bridaron el propio Marchionne, Schiaretti y Macri (ninguno habló con la prensa).
La inversión será de US$ 500 millones será para producir un sedán que reemplazará al Grand Siena y al Linea. “Esta fábrica, que tendrá la última tecnología disponible de FCA, ocupará un rol fundamental en nuestra estrategia de expansión y del fortalecimiento en Argentina y la región”, señaló Marchionne en su discurso.
Resumen del discurso de Marchionne:
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Desde la empresa destacaron que se montará una nueva línea de montaje en la actual planta y no se especificó cuántos nuevos puestos de trabajo generará. En ese sentido, el ministro de Producción, Roberto Avalle, especificó que “en principio se conservarán los que la empresa tiene en la actualidad. Sí se van a sumar unos 1.500 empleados de las autopartistas que se sumarán al proyecto, que en principio serán unas 20 a las que ya están trabajando”.
A su turno, el gobernador Schiaretti destacó la inversión e hizo hincapié en el difícil momento que está atravesando Brasil y que repercute en Córdoba. “Los problemas de la macro economía brasileña crean problemas en el empleo en Córdoba. A los problemas no hay que esconderlos, hay que enfrentarlos”, sostuvo el mandatario.
Por su parte, Macri resaltó el hecho de que Fiat haya concretado esta inversión en Córdoba, “como signo de confianza” ante la nueva gestión que encabeza. Luego, destacó que sigue trabajando en “bajar la inflación”.
Resumen del discurso de Macri:

Luego de anunciar una inversión de US$ 650 millones para la producción de un nuevo modelo en su planta (que será oficializada esta semana en Casa Rosada), Fiat sumará toda la producción del Palio, que actualmente comparte con la planta brasileña de Betim.
La información, publicada en el sitio Cars Drive en base a información del sitio brasileño Autos Segredos, da cuenta de que la transferencia de toda la producción del Palio a Córdoba tiene como motivo liberar espacio en la planta de Betim, en el estado brasileño de Minas Gerais, para la producción del nuevo auto de entrada de gama de la marca en el Mercosur.
Se trata del modelo conocido por ahora por su nombre en código X1H, que será más chico que un Fiat Uno y que deberá ser lanzado en abril en Brasil, después del lanzamiento de la Fiat Toro.
De concretarse estos proyectos, en los próximos años la planta de Ferreyra tendrá dos proyectos “monolocados” (es decir que se fabrican en una sola planta), el Palio y el nuevo sedán. También se seguirá produciendo el Siena y el viejo Palio Fire (al menos por un tiempo más).

Cristiano Rattazzi, el presidente de FCA, anunció que la compañía invertirá entre US$ 600 y US$ 700 millones en la planta que posee en Ferreyra, con el objetivo de producir un nuevo modelo. Lo hizo, en la apertura del nuevo concesionario oficial que la firma tiene en Córdoba: Montironi.
La información, dada a conocer por el periodista Mauro Osorio en Radio Mitre Córdoba y en su sitio Cars Drive, da cuenta de que el proyecto “va a ser global, la idea es poder exportarlo a Europa”. Además, el empresario señaló que “si se cumplen los plazos previstos, el nuevo modelo se estará anunciando para mayo del 2017”.
Inclusive, Rattazzi dijo que aguardará que Mauricio Macri asuma la presidencia de la Nación para comunicarle oficialmente el proyecto. “También me gustaría hacer partícipes a Juan Schiaretti y a Ramón Mestre. Vamos a hacer una importante inversión pero es necesario que colaboren todos, necesitamos un desvío desde la autopista y se tienen que poner de acuerdo Provincia, Ciudad y Nación”, dijo Rattazzi.
En cuanto a la integración con las autopartistas, Rattazzi sostuvo que  “vamos a trabajar mucho con autopartistas para lograr mucha integración local de piezas, queremos lograr más del 55%, queremos tener las piezas lo más cerca posible y no tener que traerlas de Belo Horizonte (Brasil), ya que eso nos da competitividad”.
En esa línea, hace dos semanas Punto a Punto publicó que Rattazzi había dejado trascender la producción de un nuevo vehículo (no se estimaba una inversión de estas características) y fuentes cercanas a la empresa señalaron que “el objetivo es ganar la producción exclusiva de un vehículo para no depender de la planta de Betim, en Brasil.
 

El secretario de Transporte de la Municipalidad de Córdoba, César Ferreyra, uno de los cuatro imputados por supuesta defraudación a la administración pública, señaló que «no hubo desvío de fondos públicos de la empresa Tamse a Ersa».
«Ersa hizo un acuerdo privado con Tamse, pero no hubo desvío de fondos ni daño al erario público», aseguró el funcionario en declaraciones a Cadena 3.
Según Ferreyra, «la flota de vehículos de la cual se habla fue dada de alta en la gestión del intendente Ramón Mestre y se solicitó a la Nación que los incorporaran al inventario general del transporte».
«La Nación nunca contestó y lo incluyó a la flota de buses, a pesar de que eran troles, porque la norma dice que los troles sólo pueden ser eléctricos, por eso nunca recibieron el subsidio de gasoil», explicó el secretario.
«Ersa hizo un acuerdo privado y le proveyó a Tamse el subsidio que nunca recibió de la Nación», añadió. La causa indica que «empresas privadas percibieron el cobro de sumas en subsidios para coches del transporte urbano de la ciudad, que corresponden a vehículos de la Tamse residual, provocando un perjuicio al estado municipal cercano a los 240.000 pesos por mes».
«Lo que se paga con subsidios nacionales no es cada vehículo, es el servicio de transporte en general», explicó el funcionario.