Bastó con que llegara el frío para que se reeditara un clásico de todos los años: el corte del servicio de gas para el sector industrial. En ese marco, el ministro de Industria, Comercio y Minería de la Provincia, Jorge Lawson, fue entrevistado por el programa “Todo Pasa” de Punto a Punto Radio 90.7, en donde criticó con dureza al Gobierno nacional por la falta de una buena política energética.

– ¿Cómo analiza la situación energética de cara al invierno que se viene?
– La verdad es que la situación energética es delicada. No es la que debería ser. En un país que ha crecido, deberíamos tener energía suficiente para que nuestras empresas y nuestra industria crezca, pero la política energética de nuestro país no es buena. Hemos dejado de tener autoabastecimiento, somos importadores, y no alcanza la energía para nada. Ver que el primer día frío del año cortan el gas, a uno le preocupa, es como si no nos dimos cuenta de que en verano hace calor y en invierno frío. Es como la ley de la gravedad; no están tomando las medidas que corresponden y Córdoba lo sufre el doble, por ser industrial y con una importante densidad demográfica, entonces tiene más necesidades energéticas que otras provincias.

– ¿Esto se debe a la falta de una política energética correcta a nivel nacional?
– Sin lugar a dudas. La política energética del país, en los últimos 10 años, no ha sido la correcta. La prueba está en que no tenemos gas y no tenemos energía. Además, cuando una provincia como Córdoba decide invertir, utilizando sus propios recursos, para crear las redes troncales que necesita para abastecer de gas a más de 1.000 industrias de Córdoba y lo único que tiene que hacer la Nación es permitir que el banco brasilero que financia el proyecto ingrese al país, increíblemente se lo niegan.

– Si se suman estos inconvenientes a los que ya muestra la industria, el panorama es un tanto oscuro, ¿no?
– El escenario no es el ideal, es confuso. Pero yo creo que en épocas como estas, en que todos se quejan, hay que tomar decisiones y hacer aportes. Lo que debemos hacer es tratar de pasar el momento de la mejor manera, aportar ideas, dialogar y tratar de generar condiciones para que esto tenga futuro. Es importante marcar la situación de retroceso que vivimos, pero no es bueno detenernos allí. Tenemos que imaginar qué podemos hacer para que el daño sea lo menor posible.

– ¿Cuáles son las próximas medidas para poder finalmente lograr el aval para los gasoductos?
– Estamos permanentemente reuniéndonos con los industriales y cámaras de desarrollistas, todos aquellos que necesitan energía. Estamos viendo cuáles son las cosas que podemos hacer desde nuestra provincia y trabajando en conjunto, pero no es fácil. En Córdoba tampoco nos sobra el dinero, pero con todo el dinero que nos deben podríamos hacer muchas obras que Córdoba necesita. Y por suerte en Córdoba el empresariado y el Gobierno nos entendemos y nos tratamos bien. Creemos que debemos aportar al desarrollo de nuestras empresas, para que crezcan; entendemos la rentabilidad. Lejos de lo que puede ocurrir en otros lugares, no peleamos con los empresarios; estamos convencidos de que es bueno que ganen; pero también que aporten, que den trabajo, que se comprometan socialmente. Es un ida y vuelta.

– Entonces, ¿son optimistas o no sobre que llegue ese aval?
– Estaría mintiendo si digo que soy optimista. Nos genera serias dudas, pero ojalá pudiéramos encaminarnos en un país donde pudiéramos dejar las diferencias políticas para las elecciones, y trabajar en conjunto. La gestión debe tener el camino de los acuerdos, los entendimientos, y aún con las diferencias, poniéndolas en la mesa y respetando. Nosotros pensamos así. Del otro lado, aparentemente no.