“La obra pública más grande de la historia de Córdoba”. Así calificó una y otra vez el ex gobernador Juan Schiaretti el proyecto de construcción de cinco sistemas regionales de gasoductos que iban a extender la red gasífera por todo el interior provincial, con una inversión superior a los US$ 350 millones.
Pero los políticos a veces se olvidan de que la democracia supone que ellos son elegidos para representar y defender los intereses del pueblo y así es como una pelea política derivó en que unas 300.000 personas de un centenar de localidades del interior vean frustrado su sueño de contar con una mejor calidad de vida.
Es que en las últimas horas, el gobierno de Córdoba resolvió instruir a la Agencia Córdoba de Inversión y Financiamiento (ACIF) a que “proceda a la rescisión de los contratos de obra suscriptos con la UTE Andrade Gutierres y IECSA para la ejecución del Proyecto Ejecutivo, Provisión de Materiales y Construcción de las Obras de Infraestructura para la Gasificación por Ductos de los sistemas Regionales ‘Centro, Sur y Ruta 2’ y ‘Norte y Este’, en el marco del Programa de Gasificación de Localidades del Interior de la Provincia de Córdoba”.
Repasando lo acontecido desde 2009, cuando se firmaron los contratos, hasta ahora, el Estado provincial repasa que la obra iba a ser financiada en un 75% por el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDES) y que “en junio de 2011 los largos trámites se concluyeron y la provincia de Córdoba diligenció ante el Banco de la Nación Argentina la apertura de las cartas de crédito a las importaciones, a fin de poner en marcha el contrato oportunamente firmado. El Directorio del Banco Nación resolvió girar nuevamente el expediente a MECON, de donde no volvió a salir pese a las intimaciones efectuadas por la Provincia de Córdoba”.
Por ello, “el BNDS notificó que la operatoria de crédito había caducado, con lo cual la licitación se anula dado que las empresas oferentes no tienen el financiamiento de las obras, que fue condición indispensable para el otorgamiento del contrato”, concluye el comunicado oficial.
Llamativamente, la administración de José Manuel De la Sota decidió no ser tan confrontativo con el Gobierno nacional en esta oportunidad cuando la realidad es que el kirchnerismo fue el que decidió trabar la llegada de estos fondos que, se insiste, hubieran significado una notoria mejora en la calidad de vida para las familias y empresas de las zonas que se iban a beneficiar.
El listado concreto, a donde las autoridades deberían ir a pedir perdón por lo sucedido, era el siguiente:
– Sistema Regional Sur: Tosquita, Vicuña Mackenna, Washington, La Cautiva, Villa Sarmiento,  Del Campillo, De la Serna, Villa Valeria, Nicolás Bruzzone, Mattaldi, Jovita, San Joaquín, Serrano, Huinca Renancó, Villa Huidobro, Ranqueles, Pincén, Italó, Onagoity e Hipólito Bouchard (40.000 habitantes).
– Sistema Regional Centro: Bouwer, Rafael García, Lozada, Despeñaderos, Los Molinos, Monte Ralo, San Agustín y Corralito (15.000 habitantes).
– Sistema Regional Ruta 2: Noetinger, Saira, Alto Alegre, Cintra, Chilibroste, San Antonio del Litín, Colonia Silvio Pellico y Ana Zumarán. (10.000 habitantes)
– Sistema Regional Norte: Sarmiento, Villa Gutiérrez, Avellaneda, Villa Tulumba, San José de La Dormida, Simbolar, Las Peñas, Los Mistoles, El Rodeo, Santa Elena, Cerro Colorado, Rayo Cortado, Chañar Viejo, San Francisco del Chañar, Villa de María de Río Seco,  Eufrasio Loza, Gutemberg, Sebastián Elcano, Las Arrias, Villa Rosario del Saladillo, La Posta, Capilla de Sitón, Caminiaga y San Pedro Norte (26.000 habitantes).
– Sistema Regional Este: Capilla de Los Remedios, Río Primero, Cañada de Machado, Piquillín, Pedro Vivas, Santiago Temple, Los Chañaritos, La Tordilla, El Fuertecito, El Tío, Villa Concepción del Tío, La Francia, Colonia San Bartolomé, Colonia Marina, Villa Santa Rosa, Diego de Rojas, La Puerta, Obispo Trejo, Cañada de Luque, Chalacea, Villa Fontana, La Para, Marull, Balnearia, Miramar, Altos de Chipión y La Paquita. (180.000 habitantes)
Además, otras poblaciones que iban a recibir un beneficio indirecto eran Tránsito y Arroyito, que actualmente disponen del servicio de gas natural abastecidas desde el gasoducto de Arcor. También Villa del Rosario y Costa Sacate, que también disponen del servicio de gas provisto por Arcor, pero existen limitaciones para expandir las áreas de cobertura originadas en la saturada capacidad de transporte de dicho ducto.
Se esperaba asimismo que las mejoras podían extenderse en un futuro a Capilla del Carmen y Rincón, y que se podrían beneficiar las localidades comprendidas dentro del proyecto CECRECE: Devoto, Estación Luxardo, Freyre, Porteña, Seeber, Brinkmann, Colonia Vignaud y Morteros.