La División Finanzas Corporativas de BDO Argentina realizó una encuesta a 100 líderes empresarios de medianas y grandes empresas, de capitales nacionales y extranjeros, que facturan unos $ 360 mil millones en total. Según el estudio, un 50% de los encuestados indicó que no variará su dotación de personal durante 2016, mientras que un 24% señaló que disminuirá algo y un 22% que aumentará.
De acuerdo al mismo estudio, ante la pregunta sobre qué espera que ocurra con el nivel de ocupación de su capacidad instalada, el 40% indicó que no variará, contra un 34% que dijo que aumentará. En cuanto a las inversiones en la ampliación de capacidad o incorporación de equipos o vehículos, el 28% considera que posiblemente se realicen inversiones en los próximos meses, siendo esta inversión un 47.7% en renovación de equipos y vehículos, un 27.3% en ampliación de capacidad y un 18.2% en tecnología.
Ante la posibilidad de incorporar nuevos productos o servicios, el 35.5% adujo que es una posibilidad, mientras que el 25.5% no prevé inversiones de este tipo. A la hora de indicar los motivos que influyen en las decisiones para invertir, el 69% plantea las perspectivas de negocio como variante primera y luego las condiciones del mercado, con un 56%.
En la misma encuesta, entre los factores que amenazan el clima de negocios y más preocupan a los empresarios se encuentra la evolución del costo salarial, que ocupa un segundo lugar, con el 58% de respuestas positivas. El 62% de los encuestados indicó que el incremento salarial nominal aplicable para este año será del 30%. El promedio de los encuestados esperaría un deterioro del salario real para lo que resta de 2016.
La gestión de Recursos Humanos ocupó el cuarto lugar entre los desafíos de los empresarios para este año, con un 12% de respuestas. Los desafíos que ocuparon los primeros lugares fueron Manejo de flujo de caja (28%) y responder a los desafíos de la competencia (23%).
En cuanto a los factores de amenaza para el clima de negocios, la inflación volvió a ocupar el primer lugar (70%), como en estudios de años anteriores, seguida de la evolución del costo salarial (58%), los cambios regulatorios (44%) y aumento del tipo de cambio (43%).