El incremento en las ventas de marcas de alta gama sigue firme en el mercado local, con subas que en algunas casos supera los tres dígitos. La menor brecha de precios entre las marcas generalistas y las premium es uno de los factores que más potencia el mercado, con modelos masivos que son tope de gama y superan en valor a los importados.
Desde que se impuso el cepo al dólar y las firmas más emblemáticas de lujo tienen un tipo de cambio oficial, el negocio cierra redondo para muchos compradores.
Así, las tres líderes registraron los siguientes incrementos entre enero y julio en comparación con el mismo período de 2012:
•Mercedes Benz 34%
•Audi 18%
•BMW 10%
Otras marcas importadas de gran valor que ganan terreno son:
•Lan Rover 179%
•Jaguar 133%
•Alfa Romeo 114%
•Porsche 97%
•Jeep 81%
•Smart 57%
Cómo sigue
De acuerdo con el análisis de Gonzalo Dalmasso, coordinador del Sector Automotriz de Abeceb.com, el segundo semestre del año no será tan beneficioso para las automotrices como sucedió hasta julio, señaló a IProfesional.
En esta primera etapa, se dio un rebote de la relación con Brasil que había sufrido algunas complicaciones en 2012. Ahora, no sólo se pudo recomponer la relación y se ganó participación en el mercado brasileño incluso con una cuota de mercado que se sacó a México.
De esta manera, hubo un primer semestre dinámico tanto por las exportaciones (Brasil representa el 85% de las ventas de la Argentina) como por el frente interno. Sin embargo, hacia el segundo semestre, pueden surgir algunas complicaciones.
Según Dalmasso, empezaron a sonar algunas alarmas del mercado vecino, una de ellas, que el ritmo de patentamientos se contrajo en julio. De esta manera, las automotrices locales comenzaron a ajustar el ritmo de producción teniendo en cuenta que es el principal destino de los modelos fabricados en la Argentina. Además, por el momento, no se espera que el consumidor brasileño pueda cambiar sus expectativas de consumo, ya que se encuentra con una caída de la confianza por conflictos políticos y sociales.
Por otro lado, el mercado de créditos también comenzó a desacelerarse para depurar la cartera y apareció un nuevo fenómeno por el cual cambiar el auto usado es cada vez más caro en Brasil. Estos fenómenos hacen pensar en un segundo semestre más lento en Brasil que afectará a la Argentina. «En la segunda mitad del año las terminales adaptarán la producción al mercado brasileño, que terminará estable el 2013 pero no recuperará la dinámica», explicó Dalmasso.
Por otro lado agregó: «el consumo local seguirá fuerte y habrá más restricciones a los importados porque no se logró el superávit comercial». Con este escenario, Dalmasso pronostica que la industria automotriz se irá desacelerando hacia fin de año, aunque terminará siendo un año récord y muy positivo en el contexto local.